Este tema es muy importante para entender bien el concepto de libertad y poder, e ir encontrando cuál es el papel del poder “para”, respecto del poder “sobre” ¹; que no deben ser diametralmente opuestos sino complementarios, generando una entidad y una racionalización comunicativa (razón pública).
El problema del reclutamiento ilícito es una responsabilidad compartida entre el Estado y los grupos armados ilegales. Tanto los actos de aquellos como de los otros lesionan las potencialidades de los niños, niñas y adolescentes (NNA), como son su libertad, las oportunidades para su desarrollo psicológico, educativo, profesional, social, económico, etc. Son vulnerados, bien por la acción de los grupos armados ilegales como por la omisión (ausencia) del Estado en los territorios colombianos.
Veamos pues esta situación, entendiendo el concepto de reclutamiento. A partir de la definición elaborada por Bretones y Rodríguez, (2008) y señalada en Wikipedia se define como “un conjunto de procedimientos utilizados con el fin de atraer a un número suficiente de candidatos idóneos para su puesto específico en una determinada organización”. En este orden de ideas el procedimiento gráficamente sería:
En este orden de ideas lo que se puede deducir, inicialmente, es que la organización requiere de personal para cumplir su misión, en consecuencia, su proceso va encaminado a interesar e identificar posibles candidatos que llenen sus vacantes. Por lo cual los métodos de reclutamiento a utilizar son una estrategia. Los métodos normales son la comunicación abierta, por medios abiertos o agencias de empleo, sindicatos, asociaciones de profesionales, etc.
En resumen, para estos casos de transparencia, la incorporación es de índole voluntaria. Esto señala que la persona cuando ingresa a la organización lo hace por: le interesa la organización per se, satisface sus necesidades profesionales, compensa sus necesidades económicas, ve allí el desarrollo de una carrera organizacional (ascensos), existe garantías sanitarias, hay una estabilidad y un contrato laboral. De igual forma se puede retirar, si encuentra otras y mejores opciones laborales.
Como quiera que los NNA que han sido reclutados por grupos armados ilegales, elementos o factores como; tipo o estructura familiar, estructura de la vivienda, contexto educativo, como la falta de protección (seguridad, presencia del Estado) y su madurez psicológica, son los ingredientes o escenarios de riesgo (vulnerabilidad), en los que están inmersos y de hecho son un catalizador para padecer o vivenciar este problema.
Estructura familiar. Son NNA que pertenecen a familias disfuncionales, donde su estructura es un padrastro o madrastra, padres alcohólicos, hermanastros, con comportamientos agresivos, abusadores, priorizan el trabajo de campo sobre la educación (la supervivencia es importante).
Estructura de la vivienda. Son viviendas donde el hacinamiento prevalece, no existen sanitarios o si los hay, no son los más funcionales; no hay agua potable. La estructura de sus paredes es hecha en adobe. Techos con tejas de zinc o aluminio. Sus cocinas funcionan a base de leña y no se tiene luz. Las camas son compartidas. Este entorno es vulnerable ante los impactos ambientales, deslizamientos, inundaciones, terremotos, tormentas, etc.
Contexto educativo. Los NNA para poder estudiar se tienen que desplazar de sus hogares a los centros educativos, por espacios que, por lo menos, les exige una hora de camino. No poseen todos los elementos académicos necesarios para la adquisición de conocimientos (libros, lápices, computadores). A lo anterior se le puede sumar que, si no todos, una gran parte de ellos o ellas no van desayunados, ni llevan onces. Las instalaciones en materia de higiene, recursos, no son de las mejores. Sus profesores en una misma aula atienden dos o tres cursos diferentes, no son muy bien pagos y cuando enferman no existe reemplazo alguno.
Presencia del Estado. En estas zonas la única presencia es la de los grupos armados ilegales, quienes asumen la autoridad. En consecuencia, las personas que visualizan en los caminos, los NNA, en el trayecto hacia sus lugares de estudio, son los integrantes de estos grupos, quienes, con sus comportamientos, vestimentas (uniformes, armas), tratos, formas de comunicación, representan a sus modelos sociales. En consecuencia, esta situación activa en los NNA el aprendizaje vicario.
En lo psicológico, son NNA que, por su racionabilidad, aún no se encuentran en la capacidad para tomar decisiones. La disonancia cognoscitiva (enfrentamiento de dos posiciones o ideas), es un hecho a favor del reclutador. En este sentido es de vital importancia señalar que frente a una opción no se puede tomar una decisión, aceptarla es un sometimiento, es perder la voluntad (reclutamiento a la fuerza). Cuando se tiene dos (2) opciones, nos encontramos frente a un dilema, donde las dos (2) opciones pueden ser buenas como malas. No hay decisión es una polarización (disonancia cognoscitiva). Bajo esta situación la persuasión o el engaño son efectivos. Cuando existen tres (3) opciones, allí si podemos hablar de toma de decisiones, pues se permite reflexionar, comparar, triangular, ver semejanzas, diferencias y relaciones entre las opciones (libertad, decisión voluntaria).
En resumen, las decisiones deben ser voluntarias, entendidas en sus diferentes contextos y los resultados deben beneficiar tanto a la persona que toma la decisión como a las cosas y personas que pueden estar inmersas en los resultados de estas decisiones.
Frente a las decisiones que supuestamente toman los niños, niñas y adolescentes para formar parte de los grupos armados ilegales se ha elaborado el siguiente cuadro que permite ver comparativamente los procesos cognitivos por los cuales pasan o se ven enfrentados.
En virtud de todo lo anterior (contexto), los reclutadores para la incorporación a sus filas utilizan los siguientes criterios: Espaciales o geográficos: personal ubicado en el campo, distante a las zonas urbanas (marginalidad), zonas donde haya cultivos ilícitos; espacios de difícil acceso; académicos, jóvenes con bajos niveles de estudio o analfabetas y con pobres conocimientos en política social, participación comunitaria; lugares de habitación, sin agua potable, servicios sanitarios no adecuados para la disposición de las excretas, sin servicio de luz eléctrica; familia, pobre, desarticulada o disfuncional; habilidades y destrezas, que posean conocimientos en un arte, oficio u ocupación (no para todos), con el fin de articularlos en cargos como enfermería, comunicaciones o economatos.
Otra técnica de reclutamiento es permitir a los guerrilleros, que su vida social y afectiva se desarrolle fuera de la organización armada, para que los futuros vínculos afectivos sean la justificación para un nuevo reclutamiento, de las parejas y posiblemente familiares.
Otra forma es la de mostrar una fachada de ser una organización lucrativa, haciendo compras de artículos y productos a finqueros y comerciantes, dando a entender que los ingresos son suficientes y no padecen de necesidades. Elemento que podía ser atractivo para los hijos de los comerciantes o vecinos.
La formas motivacionales de los reclutadores (persuasión, engaño) es manifestando, en las reuniones que invitan (de manera voluntaria u obligatoria), es que allí van a encontrar mejores expectativas de vida, incentivos económicos (eliminación de la pobreza), poder (capacidad de dominio), ser comandante (ascensos), medio para vengarse por muerte de padres o familiares, acompañamiento a familiares guerrilleros, aislarse de la violencia intrafamiliar (protegerlos de los abusos de los padres), gusto por el uniforme y las armas, promesas de movimiento vertical social (subir de estrato), oferta de trabajo (ingreso de dinero), o en última medida, amenazas de muerte o desplazamiento de sus familiares y uso de la fuerza física (secuestro).
En la siguiente tabla se muestran las posibles modalidades de cada una de las formas de reclutamiento señaladas más arriba.
Para finalizar los NNA, que se han dado cuenta, al interior de estas filas, la vida tan dura, en tanto tienen que cumplir turnos largos de vigilancia, seguridad; adelantar actividades de inteligencia, ser parte de los equipos de fusilamiento, asaltos, emboscadas, realizar largas caminatas con equipos muy pesados, etc. y quieren en consecuencia salir de estas filas; son amenazados de muerte, tanto ellos, sus padres, hermanos o familiares.
En síntesis, las formas de reclutamiento están distribuidas en voluntaria, por amenazas, persuasión, engaño, fuerza o por vínculos familiares con miembros de los grupos armados ilegales.
¹ Ramón Maíz. Poder, legitimidad y dominación. En libro: teoría política: Poder, moral, democracia. Alianza Editorial. Enero 2010.
² Castellanos Santos, Susan Brigete. Análisis del reclutamiento forzado a menores de edad en Colombia 2005-2010. Universidad Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario. Facultad de Ciencia Política y Gobierno. Bogotá, 2013.
