La crisis que está viviendo el equipo merengue no tiene precedentes en toda su historia. En solo cuatro días el Barcelona le ganó dos veces y lo eliminó de la Copa del Rey perdiendo así –técnicamente- cualquier opción de ganar el título de Liga. Por si fuera poco, ahora un equipo marginal como el Ajax lo golea en pleno Santiago Bernabéu. Diez años habían pasado desde la última vez que el equipo se despidió tan temprano de la Champions. En la temporada 2009-10 lo había sacado el Olympique de Lyon.
Ciertamente no creo que sea la falta de Cristiano Ronaldo lo que está afectando al equipo. El Real Madrid todavía no logra recuperarse de la pérdida de tan buen jugador como James. Mientras que en su etapa final no salía de la banca, en el Bayern ya lleva siete partidos consecutivos como titular. El mismo Beckenbauer, una leyenda viviente del fútbol, alabó las virtudes del colombiano.
Por su parte, el antiguo equipo del cucuteño está sumido en la peor crisis de su historia. Una guerra de egos interna, caprichos personales y una pésima dirección técnica están acabando con el que alguna vez fue uno de los mejores equipos del mundo. Por fortuna, James está lejos de ahí. Todo pasa por algo y la salida al Bayern fue lo mejor que pudo pasarle a nuestro juegador.