La gente castigó la ordinariez, la ramplonería, los chistes flojos y vulgares, el machismo y los estereotipos culturales fomentados por La vuelta al mundo en 80 risas 2, programa de Caracol estrenado el martes de la semana pasada y con el que el canal pretendía dominar la audiencia televisiva. Aunque el programa se estrenó bien, en gran parte por el impulso que le proporcionó el partido amistoso de Colombia versus Venezuela, se desplomó estruendosamente en su segundo capítulo y desde entonces no ha dejado de caer.
El fracaso de esta producción es tal que será removida del horario en el que se estrenó o sacada de la parrilla, puesto que Caracol anunció para mañana miércoles el estreno de Bolívar, una nueva serie, a las 9:00 p.m., horario que el humorístico ocupa. Y no es para menos, ayer lunes 16 de septiembre, el programa humorístico obtuvo 8.0 deprimentes puntos de rating, siendo apaleada por los 16.4 puntos de su enfrentado, Yo soy Betty, la fea del canal RCN.
El fiasco del programa de Caracol es un claro indicio de que la fórmula cliché de poner mujeres rubias, guapas y atontadas junto a señores burdos y morbosos ya no está funcionando con éxito entre los televidentes. La vuelta al mundo en 80 risas 2 es un descarado monumento al machismo, la ordinariez y los estereotipos de género, pues no puede ser más evidente que la función de estas mujeres en este vergonzoso programa es mostrar su atractivo y servirle de elemento a los señores humoristas para que se la pasen durante todo el programa haciendo chistes de índole sexual.
Esperemos que este sea un llamado a Caracol y al resto de canales para que realicen contenidos de calidad y dejen de fomentar los perjudiciales estereotipos, el sexismo y el rancio machismo en sus producciones, lo cual tiene serias implicaciones en la sociedad.
