The Sun desató una bola de nieve alrededor del tema de la infidelidad del príncipe William con la modelo Rose Rocksavage, la esposa de David Rocksavage, el marqués de Cholmondeley, una de las familias más antiguas e influyentes de Inglaterra. Ambas familias han tenido historia compartida gracias al linaje que tienen: Rose proviene de la dinastía de cerveceros Truman, Hanbury, Buxton & Co., y, además, es la nieta de Lady Elizabeth Longman, una de las compañeras favoritas de juego de la reina Isabel en la infancia, y una de sus múltiples damas de honor en 1947. Ya, años atrás, se había puesto en la mira al príncipe William con Rose, pues cuando él había terminado con Kate, Rocksavage se convirtió en una de las candidatas para "reemplazarla", les habían construido una futura historia de amor pero además de esto, David Rocksavage, el esposo de Rose, llegó a ser un gran amigo de Carlos y Mick Jagger.
Más allá de este linaje puro, la amistad entre Rose y Kate creció de forma orgánica con el tiempo pero, según los medios, se terminó rompiendo por la infidelidad que cometió su marido. Y el rumor no llegó a quedarse allí, incluso afirman que Rose está embarazada y que ese hijo es de William. Unas fotos salieron al público y la familia real decidió tomar acciones legales en contra del diario The Sun por difamar la imagen del príncipe.
No cabe duda que ni la realeza está libre del escándalo. Varios medios han señalado que el príncipe William le ha sido infiel a Kate Middleton, nada más y nada menos, que con la mejor amiga y vecina de su esposa: Rose Hanbury, Marquesa de Cholmondeley.https://t.co/gcHZgdgAPP pic.twitter.com/4Fz5j5ZkxY
— OPR (@OPR_Noticias) 5 de abril de 2019
La periodista de Slate Magazine, Nicole Cliffe, publicó en Twitter que la infidelidad de William fue lo que realmente desembocó una discusión difícil con su hermano, el príncipe Harry y dijo: “Como es tan cercano a él, Wills le contó a su hermano de la aventura y este se puso furioso, le preguntó qué diablos le pasaba y le recordó que tiene tres hijos pequeños y que esa conducta de su padre arruinó su infancia”. Los comentarios que han surgido alrededor de este tema han sido infinitos. Han llegado incluso a comparar esta situación con el famoso escándalo que vivió el padre del príncipe William, Carlos de Gales, con Camilla Parker Bowles cuando estaba casado con Lady Di, la madre del príncipe, hecho que marcó la depresión y desórdenes alimenticias de ella. Es como si la historia se repitiera y la infidelidad fuera el karma con el que la familia estaba maldita.
A pesar de que muchos portavoces reales han salido a desmentir la presunta infidelidad del príncipe, llamó la atención un tuit que hizo Giles Coren, periodista de The Times, en Londres, que decía: “Sí, hubo un affaire. No he leído el artículo (de In Touch), pero sé del romance. Todo el mundo lo sabe, darling”. El trino fue eliminado a las pocas horas, y pudo percibirse de nuevo la intervención de los Duques para evitar las especulaciones. No importaron en ese momento los rumores, porque Slate Magazine y otros sitios web aseguran hoy día que hay pruebas consecuentes que dan razón a esa infidelidad, y que si en algún momento se deciden mostrar al mundo, se sabrá la verdad.