Lo han dicho grandes pensadores a través de la historia y lo han anticipado muchos otros con visión futurista, las dificultades, desafíos y obstáculos despiertan nuestra creatividad y nos permite ver las oportunidades que se esconden en ellos.
Unos inventan porque el ingenio es parte de su estado natural de alertas ante la dificultad, otros lo hacen por oficio y vocación, otros porque si no invento; no vivo, pero en general todos en mayor o menor grado tenemos esa capacidad de inventar, de crear, de generar ideas que nos ayudan a superar las grandes crisis, no en vano, expresaba Albert Einstein “Es en la crisis donde nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias”… “Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar superado…”
Lo made in Colombia para combatir el COVID-19 que jamás se usará
Me ha sorprendido, con iniciativas criollas, la inventiva desarrollada por algunos para diversificar sobre nuestros sistemas productivos haciendo uso de los recursos disponibles, producción de alcohol para desinfectar superficies en lugar de contaminar el hígado, los productores de joyería lo son ahora de caretas de protección y los antes dedicados a la confección de prendas, hoy producen elementos de protección y tapabocas lavables y no lavables, los técnicos e ingenieros dejando a disposición lámparas ultravioleta que desinfectan los espacios, cabinas de desinfección por aspersión química y hasta ventiladores genéricos han logrado inventar para afrontar la crisis. En menor escala pero no con menos iniciativa se encuentran los pequeños negocios o emprendedores inventando en las redes sociales como atraparnos, cómo llegarnos con sus fórmulas, recetas o pequeños negocios que despierten nuestro interés, suplan nuestras necesidades o faciliten nuestro diario vivir en medio del encierro.
Son esas iniciativas, la capacidad de emprender y nuestro orgullo criollo, el salvavidas, que no nos permitirá sucumbir, cuando la marea se calme.