Aunque el exsenador Eduardo Pulgar se encuentra pagando una pena de cuatro años por corrupción, se niega a morir políticamente y está buscando a toda costa que su esposa, Ana Josefina Ucrós Rosales, llegue al Senado. Para ello cuenta con el poder político con el que cuenta en Soledad, Altántico, de donde es oriunda su pareja.
Los Ucrós son una familia de peso en el municipio. Desde que se integró a la familia, Pulgar se ha movido como pez en Soledad. En 2019, logró que su cuñado, Roldolfo Ucrós llegará a la alcaldía derrotando a William Torres, cuya candidatura fue impulsada por Fuad Char, pero el poder de Pulgar prevaleció y Torres perdió por 9.000 votos. Federico Ucrós, primo de la esposa de Pulgar, es diputado de Soledad por el partido Conservador. A esto se le suma, que la fórmula de Ana Ucrós sería la representantes a la Cámara, Jezmi Barraza, hija del empresario y diputado de Cambio Radical, Sergio Barraza, también de Soledad en donde los Barraza son conocidos por sus prósperos negocios en el que se destaca uno de los mataderos más importantes de la región.
Aunque el Partido de La U, en donde militaba Pulgar, no le ha dado el aval a su esposa a quien se le podía aguar la fiesta puesto que la líder de la bancada, Dilian Francisca Toro, aseguró que todavía no se ha concretado su entrada, en el pasado a Pulgar usó a su primera esposa como salvavidas políticos y le funcionó a la perfección. Cuando fue sancionado e inhabilitado en el 2003, también por corrupción, Pulgar llevó a su esposa del momento, Karima Mota, a la Cámara y luego al Senado en donde ayudó con la reelección del procurador Alejandro Ordoñez y luego en un tome y dame, Ordoñez le revocó la inhabilidad a Pulgar. La misma táctica que utilizar ahora con Ucrós.
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