Si habían tres candidatos ganar las grandes vueltas del 2019 eran los colombianos Egan Bernal, Nairo Quintana y Rigoberto Urán. La preparación, el cambio de equipo en caso de Nairo, las ganas que tenía Urán, todo quedará en nada. Los colombianos viven una nueva época dorada en el ciclismo mundial después de que la UCI le diera duro al EPO. Es que hubo un momento en que ciclistas europeos, dopados hasta las cejas, no tenían problema alguno en subir las escarpadas montañas de los Alpes, extensas como las cordilleras colombianas. La altura ya no era un factor preponderante. El Epo le daba el oxígeno necesario. Por eso, una muestra de lo limpio que está el ciclismo mundial es que Egan haya ganado el Tour de Francia del 2019.
Y esperaba repetir y empezar la leyenda de los grandes campeones. Pero una decisión de la Unión Europea puede dar al traste con esa intención. Es que la reapertura de fronteras que planean en Europa no cubriría países de América lo que haría completamente imposible el traslado de los pedalistas colombianos a Europa debido a las medidas sanitarias asumidas para contrarrestar el Coronavirus.
Mientras tanto la Federación Colombiana de ciclismo está intentando conseguir un vuelo humanitario para enviar a los campeones colombianos a Europa.
