La devoción hacía la iglesia cristiana Manantial de Amor pesó más para el exalcalde de Bucaramanga, Luis Francisco Bohórquez, quien pasará los próximos 17 de años en la cárcel por los $17 mil millones destinados a obras públicas que destinó a su iglesia. Antes de lanzarse a la alcaldía de Bucaramanga en el 2011 donde obtuvo el apoyo de Rodolfo Hernández, junto con su tía, que a la vez era su esposa, Teresa Pedraza, fundaron la iglesia Manantial de Amor en el barrio popular La Cumbre en el sur de Bucaramanga donde amasaron un número de feligreses que luego se extendió a Girón y Piedecuesta en Santander, Bogotá y alcanzó a llegar hasta Nueva York.
Desde su llegada a la alcaldía en 2012, el alcalde Bohórquez firmó 5 contratos por $ 17 mil millones con pastores de la Iglesia Manantial de Amor. Detrás no solo estaba la pastora Teresa Pedraza, de quien se separó antes de llegar a sino familiares cercanos a él o a sus hijos.
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El primer contrato fue con la empresa Probaco por un valor de $ 482 millones y una posterior adición de 263 millones por alumbrado público. La empresa fue creada por una prima de Bohórquez, Zayda Judith Cristancho Pedraza, y su tía, la pastora Blanca Marina Pedraza.
El segundo contrato fue de $70 millones y adjudicó a la empresa Azarias SAS, una empresa nacida en la casa de Lucila Pedraza de Cristancho, tía de Bohórquez. El representante legal de la empresa era el maestro de obra Uriel Ávila Méndez, que asistía a la iglesia Manantial de Amor.
El tercer contrato se le otorgó a otro fiel de la iglesia Óscar Mauricio Benavides Toloza del populoso barrio La Cumbre. El contrato era de $2.620’421.796 que tenían como objeto poda de árboles e identificación de postes y luminarias, solo se presentó un solo proponente.
El cuarto contrato era de $1.000 millones para suministrar una asesoría técnica para labores de control de espacio público, y la empresa que se le quedó era la de Raúl Amaya, otro fiel de la iglesia Manantial de Amor.
Rodolfo Hernández y su bandera anticorrupción
El excandidato presidencial, Rodolfo Hernández, apoyó a Luis Francisco Bohórquez cuando se lanzó a la alcaldía en el 2011, pero terminó prendiendo las alarmas una vez el periódico Vanguardia Liberal denunció los tentáculos del exalcalde en su iglesia Manantial de Amor. En este momento, Rodolfo Hernández emprende su lucha anticorrupción con la que despegaría su vida política y la que posteriormente se convertiría en la bandera de su campaña a la alcaldía de Bucaramanga siendo “Lógica, Ética y Estética” el movimiento independiente por el que lanzó su candidatura. El discurso de Hernández contra Bohórquez y los politiqueros también impulsó su campaña y terminó imponiéndose con 77.000 votos.
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En el 2017, Hernández, personalmente, llevó varias cajas al ente judicial que contenían las pruebas que enredaban a Bohórquez. La Fiscalía empezó a investigarlo y el caso lo bautizaron como “Manantial de Amor”. Los delitos por los que fue condenado Bohórquez son el de celebrar contratos sin el cumplimiento de los requisitos legales, interés indebido en la celebración de contratos, peculado por apropiación, falsedad ideológica en documento privado y falsedad material en documento público.
Bohórquez fue recluido en la cárcel de San Gil tan solo unos meses pues regresó a su casa en Bucaramanga por vencimiento de términos. Con él, también pagaran cárcel su secretario de Infraestructura, Clemente León y a su directora del alumbrado público, Azucena Durán. Los feligreses de Manantial de Amor que figuraban como representantes legales y dueños de las empresas con las que el exalcalde Bohórquez celebró los contratos, no fueron imputados.
En el 2021, Rodolfo Hernández toma la misma bandera anti corrupción para lanzarse a la presidencia con la que alcanzó a entrar en segunda vuelta mediante una campaña atípica en la que se lanzó por el movimiento independiente Gobernantes Anticorrupción y se disputó la presidencia con Gustavo Petro convenciendo a 10 millones de colombianos que el sería la solución. Aunque aceptó la curul en el Senado que le correspondía por quedar de segundo en las elecciones, renunció para lanzarse a la Gobernación de Santander en 2023, pero no logró ganar. El pasado 2 de septiembre de 2024 falleció a causa de un cáncer de colón terminal.