La denuncia que hace el Contralor General de la República, en la que se refiere a la corrupción estructural, llama a la más grande preocupación. En pocas palabras: el partido de los contratistas se apropió del panorama político nacional.
Los contratistas de alto vuelo, es decir, aquellos que fijan en las cláusulas del contrato en billones de pesos, son los que deciden quiénes llegan a los concejos municipales, distritales, las alcaldías, las asambleas, las gobernaciones de los departamentos poderosos y al Congreso de la República.
En los clubes sociales excluyentes de Bogotá, Medellín, Cali o de Miami o Panamá, se decide el destino de nuestra democracia. El elector es solo un personaje pintoresco en el acto democrático. Un figurín sin entidad y sin forma, y en muchos casos, un ridículo papanatas sometido por el fanatismo ideológico o religioso arropado por el candor y la estupidez.
Los costos de las campañas son solo un indicador numérico del daño que sufrirá el patrimonio público una vez el "elegido" tenga acceso al botín del patrimonio público, tras el acto de la posesión. El capital privado corrompe al país e instrumentaliza la democracia en pro de sus intereses canallas.
Cada vez que una cuchara con alimentos deja de llegar a la boca de un niño desnutrido, un contratista privado salta de la dicha. Siempre que un desempleado asoma el rostro de su angustia detrás de un periódico de ayer, mientras la incertidumbre y la desesperanza se lo engullen en la banca de un parque cualquiera, un contratista privado abraza a sus hijos y a su esposa con alegría, o convida a la moza a un motel de lujo.
Cuando un sueño democrático transformador y honesto fracasa en las fraudulentas cuentas electorales, un contratista privado enciende satisfecho un costoso tabaco cubano mientras apura un escocés de varios años con el que inundará su grotesco abdomen innoble.
Esos contratistas privados de "alta gama" y bajas costumbres, además de nuestro patrimonio, se han robado y seguirán robando nuestra democracia. Una pregunta suelta: ¿alguien sabe en dónde está #MejorVargasLleras en estos momentos?
