Viendo el mensaje de la ministra de educación Gina Parody, no me siento ofendida por este. Por el contrario me siento halagada, pues con todas las tareas que allí se mencionan somos capaces de asumir, pone en evidencia una vez más todo nuestro potencial, como profesionales y como personas. Y sí somos una magas para poder sortear y dar solución a todo lo que se nos presenta en el día a día.
Gracias a todos nuestros super-poderes hace que la vida en el aula sea resuelta cada día.
Bendigo a Dios por dejarme ser una mujer y además una SUPER MAESTRA.
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