Luego de no poder completar el partido entre América de Cali y Tolima el pasado domingo 12 de diciembre por lluvia extrema, el lunes en la mañana se reanudó y terminó con una victoria a favor del equipo pijao. Luego de casi quedar eliminado en el todos contra todos, América se metió a última hora y estuvo en la pelea por la final con Tolima y Millonarios, pero finalmente esta derrota sentenció su eliminación del torneo.
Juan Carlos Osorio, como todo el semestre, volvió a ser polémico en rueda de prensa luego del partido. Más allá de hablar del juego como tal, se dedicó a criticar todo lo que está mal del futbol colombiano, incluyendo la misma hinchada americana. Según él, en primer lugar, debe haber un cambio de horario para evitar a los vándalos que arruinan el fútbol.
"Para ustedes allá que imponen la ley y la justicia, es una invitación a pensar que partidos decisivos como el de hoy se puedan jugar a las 10 u 11 de la mañana. Eso hay que acompañarlo con varias normas, que las tabernas y bares no puedan abrirse sino hasta las 11 de la mañana para evitar que esos vándalos lleguen influenciados por la droga y quieran acabar con todo".
Así salió Juan Carlos Osorio del Pascual tras la eliminación del América. No fue su mejor temporada, pero es una de nuestras grandes mentes. Y así la tratan. Y sigue la violencia. Y siguen los vándalos tomándose el fútbol colombiano.
Es denigrante lo que está pasando. pic.twitter.com/G3To8qezNR
— Goles en Directo (@golesendir_) December 14, 2021
Osorio tuvo que salir del estadio escoltado por la policía, ya que le lanzaban objetos y le decían de todo al risaraldense. Para todos estos hinchas de su propio equipo también tuvo palabras al respecto. "Que quieren acabar conmigo no hay problema, creo tener el suficiente carácter, honradez, profesionalismo, derecho moral a defenderme. Pero que quieran venir de una manera violenta a querer darle un mal ejemplo a nuestros niños a pensar que el juego y el fútbol tiene que ser el desahogo de los problemas que tenemos en nuestra sociedad, es inadmisible".
Así se termina entonces una época del técnico donde se evidencia su declive, mostrando un nivel muy lejos del que alguna vez lo llevó a ser opción para dirigir a la Selección Colombia y también tomando el mando de México en el último mundial de Rusia 2018.