La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, tiene un nuevo amor. Se llama Dulce y es una golden retriever que le regaló su esposa la senadora, Angélica Lozano, tras la muerte de Lucky, el también adorado por ambas y que la mandataria conserva como un tesoro en la pantalla de su celular.
Dulce, que llegó a la vida de la alcaldesa Claudia López hace nueve meses, es su inseparable compañía y así lo ha registrado en sus redes sociales desde cuando le dijo: “bienvenida”.
En medio de temas duros para el Distrito como el Metro, la inseguridad, el aseo, la valorización, los muchos frentes de obra abiertos, Dulce hace más amables las mañanas de la alcaldesa Claudia López como ella misma lo ha reconocido.
Cuando faltan unos cinco meses para dejar la Alcaldía, Claudia López aprovecha algo de su tiempo libre para que Dulce tenga también un encuentro con la naturaleza porque, aunque a veces es difícil reconocerlo, la zona rural de Bogotá tiene más hectáreas que la misma zona urbana.
Dulce también acompañó a la alcaldesa al estadio El Campín cuando jugó el equipo profesional femenino de Independiente Santa Fe que jugó la final contra el América de Cali y le ganaron 2-0 en esa ocasión que les sirvió para ser orgullosas campeonas como lo suele estar la Alcaldesa cuando habla de Dulce o sale a cualquier lado con ella.
Lo más reciente, es que la alcaldesa Claudia López reconoce que su Dulce compañía ha crecido un montón y también, como la mandataria ha aprendido, a hacerle el quite a los incómodos congéneres.
