Por allá en 2014 se armó una gran polémica por un evento en un bar de la zona rosa de Bogotá, en el que el show principal era pelea de boxeo entre personas de baja estatura. Varios de los asistentes, que habían pagado 50 mil pesos como cover, fueron los primeros en denunciar en redes sociales el evento, que catalogaron de morboso, amarillista y degradante, por usar a personas enanas* para el show.
En defensa del evento salió Ángelo Arias, el hombre que contrató la pelea entre enanos. El hombre dijo que esta era una manera de darle trabajo a la población de estatura baja, que es en muchas veces discriminada. En esa oportunidad a los boxeadores se les pagó 280 mil pesos por el espectáculo que divirtió a los asistentes.
Si el show de los boxeadores incomodó a más de uno, el alquiler de enanos para fiestas privadas es uno de los oficios que más se critica, pero es un paquete que se sigue ofrece y se compra para diversión.
Aunque Navidad es la época que los enanos tienen más trabajo, porque varias empresas alquila su presencia y los visten como los duendes de Papa Noel, durante el resto del año se ofrecen para participar en fiestas privadas, como despedidas de novios y novias.
La empresa de eventos Voiz producciones es una de las pocas que ofrecen este servicio como divertimento. En la misma página web de la compañía dan ideas para su contratación privada.
Unos de sus formatos es el enano hombre disfrazado de mujer para despedidas de solteros. La descripción de la empresa que alquila el show dice: el mini personaje disfrazado es una vuelta de pura diversión, si ya es por si una broma que el novio se espere una striper, le cubran los ojos y le aparezca un enanito, vaya sorpresa cuando el novio vea encima el enanito vestido de striper, donde le realiza un sensual y divertido striptease al estilo moulin rouge.
El valor de este performance es de 350 mil pesos por cada enano, durante dos horas, pero si se contratan más de dos personas de baja estatura, la empresa hace un buen descuento.
*No usamos la palabra enano de manera despectiva sino como se usa dentro del negocio en el que se promocionan sus shows.