Este lunes 18 de diciembre, con cerca de 10 mil personas presentes, se dio la inauguración de una imponente obra arquitectónica en el municipio de Puerto Colombia, Atlántico, a pocos kilómetros de Barranquilla. Se trata de un faro de 70 metros con forma de vela de barco que servirá para guiar a los barcos que lleguen al puerto y que se hizo en honor a los migrantes que arribaron a Colombia por allí en el siglo XXI.
Para su realización Sociedad Colombiana de Arquitectos recibió hasta 140 propuestas de diseños y, finalmente, terminó ganando la que presentaron los samarios Alays y James Ariza. Posteriormente, entró en el juego Tecnoglass, empresa manejada por la familia Daes, con Christian Daes a la cabeza, quienes fueron los encargados de donar la obra.
A esta empresa se le recuerda en el Atlántico por haber sido la misma que en 2018 levantó un monumento similar, solo que de 45 metros y en Barranquilla, en el marco de los XXIII Juegos Centroamericanos y del Caribe. A esa edificación la bautizaron como la Ventana al Mundo y, siguiendo con la tradición, al faro que acaban de inaugurar con más de mil doscientos metros cuadrados de vidrio le pusieron la Ventana de los Sueños.
Ese mismo año, Tecnoglass construyó otro monumento similar en la Isla de la Loma al cual bautizaron como Ventana de Campeones y que se hizo en homenaje al Junior de Barranquilla. Este mide 33 metros.
La idea con la nueva Ventana de los Sueños, además de guiar en los barcos, es incentivar el turismo en la región e irá acompañada por un centro gastronómico que estará ubicado junto al muelle.
Sus 70 metros de altura le permiten ser dos metros más alto que el Obelisco de Buenos Aires, Argentina (68 m) y medir casi el doble que el Cristo Redentor de Rio de Janeiro, Brasil (38 m), dos de los monumentos más icónicos de la región. De igual manera, también supera a uno de los sitios más turísticos de Europa, la Torre inclinada de Pisa que mide 57 metros.