Se ha convertido frase de cajón en la opinión pública hablar de la vinculación de voces jóvenes y renovadas en los principales debates de nuestra sociedad; pero pocos lo están llevando a la práctica.
En abril del presente año el DANE publicó en uno de sus boletines bimestrales cómo ha mejorado la ocupación de los jóvenes entre 15 y 28 años después de la pandemia, el estallido social y la crisis económica.
Aunque el panorama con las principales ciudades capitales de Colombia es alentador, donde Bucaramanga ocupa el primer lugar con la mayor ocupación de jóvenes seguida de Medellín, Cali y Bogotá; aún tenemos ciudades donde siete y ocho de cada 10 jóvenes no tiene trabajo, como es el caso de Quibdó o Santa Marta.
Los retos que tenemos como país siguen siendo enormes, por esto es clave el trabajo articulado de la universidad, empresa y Estado para mejorar las oportunidades y al mismo tiempo tener formación para el trabajo. Es decir, pensar en la demanda y oferta académica que tiene nuestra sociedad y formar para ello.
Estas conversaciones deberían ser lideradas por los Consejos de Juventud, creados en el 2021 por el ex presidente Iván Duque, quien sacó adelante su conformación y le dio vocería a más de un millón de jóvenes en todas las regiones del país para ser voceros de las principales necesidades y dificultades que vive la sociedad moderna, siempre de manera transparente y propositiva.
Las oportunidades en lo público para las nuevas generaciones también han aumentado en los últimos años.
Podemos ver como hoy la jefa de gabinete de la Presidencia de Gustavo Petro la encabeza una joven como Laura Sarabia, con quien a pesar de las diferencias ideológicas que tengamos, debemos reconocer que con 28 años de edad llegó a estar en uno de los cargos más importantes del Estado con solvente capacidad, o el gobierno del expresidente Duque con Daniel Palacios al frente del Ministerio del Interior, siendo el más joven en la historia en ocupar este cargo. También hemos visto como desde las diversas actuales alcaldías se le dan oportunidades a profesionales con ideas renovadas como en el caso de Bucaramanga está Daniel Valencia como jefe de comunicaciones con 25 años y en Barranquilla, Juliana Solano quien es secretaria privada de la ciudad con más desarrollo industrial del país.
El Congreso de la República no se ha quedado atrás. En este periodo tenemos voces renovadas sobresalientes como Hernán Cadavid, Saharay Robayo o Jota Pe Hernández; de quien todos los jóvenes en el país tenemos muchas expectativas.
Sin embargo, los retos siguen siendo enormes. Aún tenemos 1.200.000 personas entre los 18 y 28 años sin empleo y buscando oportunidades, según las cifras del DANE, en las cuales los gobiernos, los empresarios y, principalmente las universidades, deben enfocarse en impulsar para que salgan adelante.
Puntualmente para esta población ha sido de gran ayuda programas como Jóvenes en Acción implementados entre el 2018 y 2022, donde se llegó a tener a más de 270.000 jovenes subsidiados, o el programa de Matrícula Cero que dio acceso a la educación superior gratuita a personas en condición de vulnerabilidad.
Lo importante ahora es continuar con el acelerador que se traer para consolidar la fuerza laboral que tenemos en nuestro país y seguir construyendo la Colombia que soñamos.
