Antes de llegar a la recién creada sala de instrucción de la Corte Suprema de Justicia, por postulación del Consejo Superior de la Judicatura, César Reyes llevaba un recorrido de más de 30 años litigando, 13 años como defensor público y más de 20 años como docente de las cátedras de Derecho Penal y Juicio Oral en la Universidad Gran Colombia y la Santo Tomás.
César Reyes dejó Duitama, el pueblo de Boyacá donde nació en 1965, con su cartón de bachiller del Colegio Guillermo León Valencia debajo del brazo. Se matriculó en derecho en la Universidad Gran Colombia, de donde se graduó en 1984, y continuó con una especialización en Derecho Penal de la Universidad Nacional, en Derechos Humanos en la Esap y en Docencia en la Santo Tomás. Concluyó su formación en Puerto Rico en el Sistema Penal Acusatorio con el Departamento de Justicia de los Estados Unidos, un camino similar al de Jaime Granados, el apoderado el senador Álvaro Uribe, quien terminó siendo el asesor del ministro de Justicia Sabas Pretelt de la Vega en su implementación en el gobierno Uribe.
Reyes ha sido consultor de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y docente en programas de fortalecimiento de la justicia en Panamá, Perú, México, Ecuador, Nicaragua, El Salvador, Honduras, República Dominicana y Colombia.
En manos de Reyes está la interrogación a Uribe, quien deberá responder un largo cuestionario que incluye preguntas como: ¿Qué relación tiene con las personas que han visitado exparamilitares en distintas cárceles del país? ¿Alguna vez y con su consentimiento se ofrecieron dineros o beneficios jurídicos durante esas visitas, en especial a Juan Guillermo Monsalve? Después de la indagatoria, que es posible que se alargue por la cantidad de testigos convocados, el magistrado definirá la suerte judicial del expresidente, hoy senador en ejercicio, Álvaro Uribe.
