Desde el 21 de noviembre cuando los comandantes de las Farc aterrizaron en Bogotá para la firma del nuevo texto del acuerdo de paz se reunieron en un lugar religioso. Se trata de la Casa de las Hermanitas de los pobres de San Pedro Claver al norte de Bogotá en el barrio Pasadena.
La delegación guerrillera, en cabeza de Timoleón Jiménez e Iván Márquez acompañados de los demás comandantes que fungieron como negociadores en Cuba, sostuvo reuniones con diferentes representantes del gobierno y con el comisionado de paz Sergio Jaramillo quien llegó al lugar ubicado para ultimar detalles del nuevo texto. Según Jaramillo, se discutirán con las Farc puntos de última hora que no están del todo claros y serán precisados con una ‘fe de erratas’ sobre el texto que se discutió en el último mes en La Habana teniendo en cuenta las propuestas de los voceros del No que ganaron el plebiscito.
No es cierto, como han señalado algunos en redes sociales, que las Farc se estén alojando en una brigada militar en Bogotá. Los comandantes de la guerrilla son custodiados por cerca de cientos de hombres de la fuerza pública bajo la permanente vigilancia de las Naciones Unidas y de representantes de la delegación cubana en el proceso de paz.
