Un día después de que el Consejo Superior Universitario (CSU) de la Universidad Nacional decidiera no acoger la propuesta de la ministra de Educación, Aurora Vergara y de su Viceministro de Educación Superior, Alejandro Álvarez, de nombrar a un rector encargado mientras que se resuelve el caos generado después de la sesión en la que quedó elegido José Ismael Peña, la socióloga caleña se declaró impedida para seguir supervisando este caso.
El motivo fue claro, no tiene sentido que sea Vergara quien denuncie las irregularidades del proceso de elección de Peña como rector cuando ella misma preside el órgano colegiado que lo votó y siendo que además permitió el mecanismo propuesto por el exrector de la universidad, Ignacio Mantilla.
Teniendo en cuenta esto, en medio de un Consejo de Ministros, la Ministra pidió dar un paso al costado. Petición que fue atendida por el presidente Gustavo Petro, quien inmediatamente decidió que su reemplazo fuera el ministro de Cultura, Arte y Saberes, Juan David Correa. Por lo tanto, Vergara seguirá teniendo su asiento en el CSU tal como lo dictan los estamentos de la universidad, pero la inspección y vigilancia de la designación de Peña en la rectoría de la Nacional correrán por cuenta del literato, quien quedará como ministro de Educación ad-hoc.
El primer acercamiento de Juan David Correa con la universidad pública
El bogotano realizó sus estudios en la Universidad de los Andes, la privada más importante del país y posteriormente le dedicó a su vida a la cultura y a los medios de comunicación. Después de pasos por empresas y entidades como El Espectador, la Biblioteca Nacional o la Cámara Colombiana del Libro, dio el salto para convertirse en el director de la Revista Arcadia, de donde pasó a la Editorial Planeta, donde se desempeñó como director literario y de donde terminó saliendo por estar en contra de la decisión de sus superiores de no publicar un libro sobre el Clan Char.
Entonces Petro le dio la mano para entrar a su Gobierno y ahora, sin esperarlo, dependerá de él que José Ismael Peña pueda ser o no rector de la Universidad Nacional. Su primer acto fue expedir una resolución en la que efectivamente ordena que se designe un rector encargado y que el CSU actúe para que los estudiantes vuelvan a tener una representación rápidamente tras la aceptación de la renuncia de Sara Jiménez.
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