Una semana después de que Alvaro Uribe ordenara el bombardeo al campamento de Raúl Reyes en Ecuador, Hugo Chávez salió lanza en ristre a defender a su aliado, el presidente Rafael Correa. En uno de sus programas, Aló Presidente, el líder de la Revolución Bolivariana estalló con rudeza y pintó un panorama apocalíptico: seis Sukhois saldrían de Caracas, bombardearían Bogotá y, en 15 minutos, regresarían a sus bases en Venezuela. El gobierno Uribe, quien en ese momento era presidente, revisó lo que teníamos. El panorama no podría ser más desolador.
La última gran compra que se realizó de aviones de guerra fue en el periodo presidente de Virgilio Barco, que abarca los años 1986 y 1990. En ese momento el gobierno de Jaime Lusinchi y el de Barco estuvieron a punto de irse a un conflicto internacional por la disputa del Golfo de Maracaibo, o golfo de Coquibacoa, el nombre con el que reconocía Colombia a ese territorio. Fue un amague de guerra que tuvo su coletazo.
Colombia está en mora de conseguir nuevos aviones. El gasto a largo plazo, Se estima que una hora de vuelo de los aviones KFir, que compró Virgilio Barco hace mas de 30 años, valen 56 millones de pesos en gastos de gasolina. Al cambio costarían 16 millones la hora. Y lo peor es que de los 77 aviones con los que cuenta la Fuerza Aérea, el K Fir, mejor conocido como “Cachorro de león”, es el avión más poderoso de todos y fue con el que Gustavo Petro pudo romper la barrera del sonido el fin de semana pasado.
Conocido como los Cachorros de León, son el milagro de la ingeniería militar israelita
Este avión ha sido el hijo de décadas de buenas relaciones políticas y diplomáticas entre Colombia e Israel pues fue en los años 80, la primera vez que el ejército colombiano efectuó la compra de 12 de estos cazadores cuyo costo unitario ronda los 4.5 millones de dólares.
Los KFIR pueden alcanzar una velocidad de 2.440 kilómetros por hora, aunque su rango de alcance no supera los 2 mil kilómetros de un solo tajo. En febrero de 2008 el entonces ministro de defensa Juan Manuel Santos viajó a Israel para buscando cerrar acuerdos para nuevas adquisiciones de dicho avión y la repotenciación de 11 de las aeronaves ya existentes. Hoy, la FAC cuenta con 24 ejemplares, de los cuales la mayoría ya está por cumplir su vida útil que es de 30 años, por lo que el gobierno de Iván Duque se encuentra ya en proceso de renovarlos.
Y para eso ya el gobierno está intentando cerrar las negociaciones que acaso arrancaron en los cuatro años de Santos. Estos serían los suecos Gripen, los Eurofighter españoles, los F-16 norteamericanos y los franceses Rafale, además de los coreanos s KAI FA-50 y misiles Lig Nex M SAM, también están en la fila para contratar.
