El abogado Carlos Alberto Villalba, quien se desempeña como juez del Juzgado Cuarto Laboral del Circuito de Santa Marta, fue quien le dio la razón a las comunidades indígenas de Taganga, quienes interpusieron una tutela pidiendo la protección de su derecho de supervivencia a través de la pesca que se veía interrumpida por el trabajo de exploración de gas offshore en el mar caribe en el proyecto Uchuva 2, el cual tiene a la cabeza a la gigante brasilera Petrobras y a Ecopetrol.
El juez falló a favor de la tutela del gobernador indígena Ariel Daniels de Andreis, quien mostró los inconvenientes del proyecto de exploración de gas natural Uchuva 2, el cual está ubicado en el Tayrona y para el cual, según él, su comunidad nunca fue consultada. Villalba ordenó la suspensión paulatina del proyecto y le dio un mes de plazo al Ministerio del Interior en cabeza de Juan Fernando Cristo para que realice una consulta previa.
Esta decisión no está en firme en cuanto la decisión ya fue impugnada por el Gobierno nacional a través de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA). Expertos del sector energético prendieron las alarmas sobre las consecuencias que podría tener el freno a este proyecto estratégico para el país.
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Esta no es la única polémica actuación judicial de este juez del circuito de Santa Marta que tiene efectos de dimensión política y económica
En octubre del año pasado, a pocos días de las elecciones territoriales y cuando todo parecía perdido para Carlos Caicedo y su Fuerza Ciudadana en Santa Marta, apareció una mano salvadora que estuvo cerca de permitirle al oriundo de Aracataca seguir otros cuatro años gobernando en cuerpo ajeno la capital del Magdalena. Tras la caída de la aspiración de Patricia Caicedo, la hermana de Carlos, el elegido para tomar las banderas fue Jorge Agudelo, quien pasó días en la Registraduría tratando de inscribirse sin éxito, hasta que el juez Carlos Alberto Villalba ordenó que se le diera vía libre a su candidatura.
Ocurrió, como se espera pase en el caso de Uchuva 2, que la segunda instancia que entonces fue el Tribunal Superior de Santa Marta emitió un fallo en el que dejaba sin efectos la sentencia de Villalba, el cual dio lugar a la victoria de Carlos Pinedo Cuello, el hoy alcalde. Incluso, días después de las elecciones, al juez le tocó admitir que él no era competente para tomar ninguna decisión sobre la tutela de Agudelo.
