Un urgente llamado a la solidaridad hizo el alcalde de la capital del Meta, luego de las lluvias del pasado jueves que no solo activaron las alertas, sino que en menos de tres horas generaron derrumbes e inundaciones a lo largo y ancho de la ciudad, en un hecho que deja hasta hoy más de 200 damnificados directos y más de 1.500 afectados.
La situación no es fácil: la Alcaldía debió decretar Calamidad Pública, y pese a los ingentes esfuerzos de los gobiernos municipal y departamental, así como a la gran muestra de solidaridad de los ciudadanos, hoy Villavicencio requiere de acciones inmediatas y comprometidas por parte del gobierno Nacional, si se quiere superar esta crisis que no deja de ser preocupante, no solo por lo que ocurrió, sino por lo que se avecina, ya que la temporada de lluvias, según el IDEAM y otros organismos, recién comienza y podría acrecentarse.
Leonel Uriel Alzate Herrera, director del noticiero Tras La Noticia, habló en exclusiva con el Ingeniero Wilmar Barbosa Roso, alcalde de los villavicenses, y esto fue lo que dijo el mandatario, quien aprovechó para lanzar un S.O.S urgente al gobierno Nacional.
Alcalde, hay una gran preocupación no solo regional sino a nivel nacional por lo que está pasando en Villavicencio, donde como no ocurría hace mucho tiempo, se ha decretado Calamidad Pública. ¿Qué fue lo que ocurrió la noche del jueves pasado, y cómo se está manejando?
Antes que nada gracias a ustedes que siempre han estado pendientes de lo que ocurre en la capital de Meta. El día jueves se presentaron unas lluvias muy fuertes que dejaron como consecuencia varias personas damnificadas en zona rural y urbana. En la zona rural, básicamente ocurrieron deslizamientos por remoción en masa de unos cerros donde estaban construidas las viviendas a los alrededores del sector denominado aquí en Villavicencio como “Chori llano” y “Pozo Azul”, en la antigua vía al municipio de Restrepo.
En la zona urbana hubo grave afectación por crecientes e inundaciones en diferentes sectores de la ciudad, sobre todo asentamientos urbanos que están sobre en las riberas de los caños y ríos que atraviesan la ciudad.
Por esta emergencia hemos tenido muchos afectados por lo que esa misma noche el comité municipal del riesgo le pide al Alcalde que decrete una calamidad Pública y así lo hicimos en una reunión extraordinaria en el coliseo de la Grama, donde tomamos de manera inmediata la decisión de trasladar a todos los damnificados en una respuesta inmediata.
También recibimos esa noche, y de manera inmediata, a más de 280 personas que luego de ser censadas las llevamos a albergues temporales y a hoteles de la ciudad para garantizar el paso de estas noches, mientras podían retornar a sus sitios con una mayor seguridad. Pero también en los censos que hicimos de las personas afectadas --que son diferente a las damnificadas-- encontramos que hoy son más de 1.500 personas en diferentes barrios de la ciudad hasta donde hemos podido entregar -- gracias a un respaldo inmediato de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo-- alguna ayuda humanitaria y en esa convocatoria a la solidaridad de los ciudadanos, pudimos recibir alimentos no perecederos, comida caliente, ropa, colchonetas, frazadas, que se han ido entregando con el paso del tiempo a la mayoría de las familias y que vamos a seguir haciendo para poder llegar a su totalidad en un esfuerzo coordinado desde la alcaldía.
Además, anoche pudimos convocar a todos los representantes de los centros comerciales, y en general a los gerentes de las grandes superficies, quienes le pudieron garantizar también a la Alcaldía la respuesta solidaria de los comerciantes que arrancan una campaña única, con un solo diseño de estrategia publicitaria, con el fin de recoger desde el mañana miércoles, por lo que se espera que el domingo próximo se haga la primera entrega.
Sin embargo, más allá de todo esto nos preocupa que lo que viene. Ahora lo más importante es prepararnos porque de acuerdo al registro del Ideam (Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales) y a los estudios hechos, el invierno apenas comienza.
En síntesis, Leonel, lo que ocurrió es una afectación solamente de un día de lluvia, en el que hemos trasladado la maquinaria nuestra y también de parte de la gobernación que nos facilitó además las motosierras, las retroexcavadoras del Ejército Nacional, y tenemos diariamente cerca de 100 hombres de la Secretaría de Infraestructura para empezar a recuperar esos sectores donde quedaron grandes cantidades de lodo y arena, algo que dejó muchas viviendas prácticamente inhabitables. Finalmente te puedo decir que hemos ido trabajando de manera coordinada durante todos los días, poniéndonos duras metas diarias para poder retornar a los habitantes de manera segura su sitio de vivienda en Villavicencio.
Alcalde, usted lo ha dicho: el invierno recién comienza, y la gente se pregunta, si con una sola lluvia se generó esta debacle, qué va a pasar cuando arrecien las lluvias. ¿Hay la infraestructura y los recursos para afrontar esta dura temporada invernal que se avecina?
Lo importante es que hemos podido convocar a todos los órganos del Gobierno, a las entidades de seguridad, a los organismos de socorro y a la Policía junto al Ejército Nacional; a todas las entidades de la gobernación del departamento y hemos escalado incluso a la Unidad –Nacional de Gestión del Riesgo, para poder tener una respuesta inmediata.
En las últimas horas también se han definido los protocolos y las responsabilidades en materia de atención y reacción, para que en el evento de una circunstancia mayor, podamos tener esa respuesta y garantizar entonces también esos primeros las primeras atenciones, y los recursos para que la comunidad sienta no solamente la respuesta inmediata, sino el acompañamiento posterior después que pasa en este tipo de eventos devenidos de la fuerza de la naturaleza.
Justo ahora, cuando la temporada invernal arrecia y genera este tipo de contingencias, aparecen también problemas en el suministro de agua potable. ¿Qué es lo que pasa con el acueducto de Villavicencio, y cuáles son sus debilidades?
Pues también producto de estas lluvias, el acueducto de Villavicencio quedó afectado en su infraestructura, tras el taponamiento en la parte alta de la bocatoma. Y no solamente por el taponamiento de las rejillas sino también hay que aclarar que se debe suspender el servicio cuando la turbiedad es mayor y no se pueden aclarar ni garantizar la potabilidad con químicos.
Entonces hubo unos cortes en el suministro para toda la ciudad, porque el resultado de las lluvias fue que se afectaron los dos viaductos y las tuberías que son las dos posibilidades de contingencia que tiene el acueducto. Por esta razón, estamos trabajando con el ramal principal y con la bocatoma y con la posibilidad principal porque aquí en Villavicencio teníamos dos posibilidades de abastecer la planta de tratamiento de agua potable en la Esmeralda, a través de dos ramales distintos. Estos se afectaron, está declarado el proceso y entonces ya están los ingenieros trabajando para que muy pronto se pueda restablecer las contingencias, pero hoy acueducto en Villavicencio está funcionando perfectamente. Los operarios se trasladaron de manera inmediata a la bocatoma, en un sector de difícil acceso y que está un poco retirado de la cabecera municipal. Para quienes no conocen, hay que aclarar que los operarios deben llegar a pie y trabajar de manera diaria cada vez que presenta algún tipo de taponamiento para garantizar que el suministro de agua no falte la ciudad. Sintetizo, Leonel, que estamos para concluir trabajando en las contingencias para poder tener un acueducto disponible en cualquier eventualidad.
Usted ha convocado los villavicenses a solidarizarse con las víctimas. La ciudadanía ha respondido de manera casi ejemplar, pero es evidente que esto no es suficiente. ¿Qué decirle al Gobierno Nacional en este momento, más allá de la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo?
Que tengan una mirada muy precisa sobre Villavicencio. No podemos decir que el tema ya pasó, porque como lo dijimos desde el principio, todo esto es el resultado de apenas un día de aguacero, y solo durante 3 horas lo que nos generó, claro, con una velocidad muy alta, esta emergencia. Es urgente y necesario convocar a los diferentes sectores del Gobierno Nacional para que estén alertas con nosotros. La Unidad Nacional de Gestión del Riesgo no ha hecho ese primer trámite para tenernos en la mira como sucede en otras tres regiones del país de acuerdo a los reportes, pero entonces esperamos concertar de manera directa con todos ellos ese apoyo que necesitamos y estamos pendientes de hacerlo. Como dije ahora en la convocatoria con los sectores privados con el comercio, hay que actuar no solamente para este suceso del jueves anterior, sino para provisionarnos de cada una de esas donaciones en este proceso que adelanta el gobierno municipal para posteriores hechos.
Hay que decir finalmente que estamos no solo dispuestos, sino también preparados para atender la situación. ¿Siente respaldo del Gobierno Nacional?
Sí, por supuesto. Sentimos que la reacción fue inmediata, bastó una llamada al doctor Carlos Iván Márquez ese mismo jueves sobre las 10:30 de la noche, e inmediatamente autorizaron unas ayudas, y desde el viernes, y hasta el día de ayer lunes nos acompañó un funcionario que es el Ingeniero Alirio Rozo de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, que ayer seguramente por necesidades del servicio lo debieron retirar. Pero hemos notado que están dispuestos todo el tiempo a ayudarnos en este proceso.