Después de realizar nuevas visitas a Hidroituango, el contralor Felipe Córdoba concluyó que el proyecto no está dejando ganancias y que la compañía EPM estaría incumpliendo la eficacia que habría prometido con la puesta en marcha. A través de este documento, la Contraloría detalló que la no entrada en funcionamiento costaría $1.1 billones y que la "destrucción del valor del proyecto" ya alcanza los $2.9 billones. En total, las pérdidas que ha dejado la represa suman $4 billones, que podrían aumentar con los daños futuros que pueda generar.
En la revisión de control Córdoba se encontró además con el deterioro en varios equipos y la infraestructura, inestabilidad en varias zonas e irregularidades en cómo se construyó Hidroituango. Este nuevo informe aumentaría el valor que tiene que pagar la aseguradora Mapfre a través de las pólizas que fueron asumidas por EPM. El contralor fue además contundente en que con este proyecto se afectaría la energía del país y posiblemente lleve más de 35 años recuperar todo lo invertido.
Acá está el informe completo:
