Manuel Calderón es un contador público que durante muchos años prestó sus servicios a un fondo de pensiones. Pero a raíz del acoso laboral que, según cuenta, sufrió por parte de sus jefes inmediatos, un día sin pensarlo lo dejó todo, para dedicarse al alquiler de los vestidos de novia más baratos.
Todo comenzó en el 2018, cuando su hermana Marcela se casó. El vestido que utilizó en su boda costó 7 millones de pesos, demasiado para una familia de estrato medio. Entonces empezó a maquinar cómo recuperar esa inversión y buscar otra forma más económica para las parejas que estaban pensando en adquirir un vestido elegante, de muy buena calidad y a la moda para su matrimonio. Fue así como surgió su marca: MIC Vestidos de Novia.
El negocio comenzó hace cinco años con una inversión de 100 mil pesos y el vestido de su hermana lo rentó en 300 mil pesos, muchas veces. Las ganancias de la renta eran reinvertidas nuevamente y así fue creciendo el capital. Según Manuel, el negocio era muy bueno y rentable, por eso tomó la decisión de dejarlo todo y ponerse al frente.
Los precios son los más baratos del mercado de moda nupcial y oscilan entre un millón doscientos mil hasta dos millones ochocientos mil pesos el más caro. Esto teniendo en cuenta que la gran mayoría de los trajes son nuevos y a lo máximo de segunda postura. En otras tiendas, el alquiler de un vestido, por barato que sea, cuesta 5 millones de pesos y el más caro está por encima de los 20 millones de pesos. Según calderón la clave está en apoyarse en talles de confección para hacer los vestidos de línea a bajo costo.
Los meses en que más se mueve este mercado son julio y noviembre. A su local ubicado en la carrera 15 # 116-36 llega todo tipo de mujeres buscando una asesoría y vestidos para su boda, porque mucha gente prefiere rentar antes que comprar. Los 30 vestidos que están para alquilar en su local son cambiados cada 6 meses y los que ya cumplieron su vida útil pasan al reciclaje de la confección. Esta es su historia: