Aún está estampillada en la memoria de los colombianos ese 20 de diciembre del 2004. Luis Fernando Montoya acababa de disputar la Copa Intercontinental de clubes con su equipo, el Once Caldas, el mismo que logró el milagro de ganarle la Libertadores al Boca Juniors. El partido contra el Porto fue tan cerrado que los portugueses terminaron ganando la Copa por penales. El mundo se le abría al profe Montoya quien sonaba incluso para dirigir la selección Colombia. Pero el destino le tenía una terrible jugada: mientras hacía las compras de Navidad y las dejaba en su casa un grupo de atracadores lo sorprendió y lo disparó.
Quince años después el profe sigue en la cama, sin movilidad en sus extremidades pero el hombre que le disparó, Luis Alberto Toro, alias El Guajiro, quien fue sentenciado a 25 años de cárcel, está libre después de acogerse a Justicia y Paz a pesar de no pertenecer a ningún grupo armado. Los otros miembros de la banda están libres. En este informe del periodista Norbey Quevedo para el Canal Premium de Win se cuenta la historia