La crisis en Venezuela no da tregua. Cada vez son más los menores que se ven en la necesidad de escudriñar en la basura con la esperanza de encontrar algo de comer para saciar el hambre que los agobia.
A ese punto han tenido que llegar por la profunda escasez de alimentos por la que atraviesa el país con las reservas de petróleo más grandes del mundo. Los estantes de los supermercados están vacíos y los pocos enseres que se encuentran son demasiado costosos para la mayoría de venezolanos. Así que muchos optan por buscar entre la basura un pedazo de pan antes de irse a la cama sin nada en el estómago.
“Tenemos que esperar que una persona se apiade de nosotros, que nos dé algo de comer o a veces no nos dan nada y nos tenemos que acostar sin comer”, dice Yesenia, una niña caraqueña.
Esa realidad contrasta con las últimas imágenes que se registraron de la gira del presidente Nicolás Maduro por Asia. En ellas se ve al mandatario disfrutando, junto con su esposa Cilia Flores, de un festín en uno de los restaurantes más lujosos de Estambul, Turquía.
El video que cuenta con miles de visitas en internet ha despertado la indignación de millones de venezolanos y de la comunidad internacional que repudia las escenas en las que aparece un Maduro con ínfulas de monarca. Mientras tanto en su país muchos muerden el polvo del hambre que dejan varios años de crisis.
“Tengo que saber sobrevivir, pidiendo, cuando no como hay que reciclar de la basura, comer de la basura”, Joel Morales, otro joven venezolano.
Las raciones de alimento que el Gobierno vende a precios regulados llegan tan sólo a 12,6 millones de venezolanos. Quienes no tienen dinero les toca pedir o sumergirse en los desechos para conseguir algo de comida. De la misión ‘Negra Hipólita’ creada por Hugo Chávez para sacar a los niños de la calle, no queda nada.
“Se los están llevando, no sé los policías. Se los llevan, los desaparecen. Me pegaron con una guaya porque yo nada más estaba pidiendo. Nos podemos matar unos y otros por la comida”, explica uno de los tantos jóvenes que sobreviven en la calle.
La Encuesta sobre Condiciones de Vida en Venezuela (Encovi) realizada por la Universidad Católica Andrés Bello, la Universidad Central y la Universidad Simón Bolívar, arrojó detalles espeluznantes respecto a la pobreza extrema que absorbe a los venezolanos, pasando de 23,6% a 61,2% en cuatro años. La encuesta también detalló que en promedio los venezolanos perdieron 11 kilos de pesos en el último año.