"El guía responsable de la tragedia del English School hubiera dado su vida para evitar lo ocurrido"

"El guía responsable de la tragedia del English School hubiera dado su vida para evitar lo ocurrido"

Con esta carta, Álvaro Prieto sale a defender a uno de los guías de Bluefields, la empresa responsable de la tragedia de María Velandia en el Amazonas

Por: Álvaro José Prieto García
abril 20, 2016
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.

En el presente artículo no busco discutir tecnicismos jurídicos y tampoco pretendo lanzar juicios apresurados y poco informados sobre la forma “justa” de solucionar el lamentable caso de la muerte de María Camila. Antes de comenzar, quiero solidarizarme con su familia y allegados. Imagino que el dolor debe ser enorme y les deseo mucha fuerza para superar esa gran pérdida. Pero hoy me siento en el deber de escribir desde la otra orilla.

Escribo esto porque conozco al guía responsable de la empresa Bluefields que estaba en el Amazonas cuando falleció María Camila. Mientras estudiaba en el colegio, tuve la oportunidad de asistir a múltiples excursiones con Bluefields y tuve la maravillosa oportunidad de adentrarme en lugares a los que muy difícilmente puedo regresar; de conocer personas a las que seguramente no volveré a ver; de desacomodarme un poco para entender que nuestro país es un lugar mágico. Cinco días atrás salió la noticia de que este guía deberá acudir a una audiencia pública en los juzgados de Leticia (Amazonas), en donde la Fiscalía imputará cargos por los delitos de homicidio culposo en concurso con lesiones personales.

Repito, no tengo la suficiente información del caso como para poder discutir si se está procediendo de una forma adecuada y jurídicamente válida. Probablemente muchos de los que lean esto no saben quién es este guía, por ende no entenderán a qué se dedica y tal vez la información que reciban de esta persona va a estar ligada al accidente ocurrido. Teniendo lo anterior en mente, quiero escribir sobre él; quiero compartir mi punto de vista sobre su trabajo, porque me parece insuficiente que una persona sea calificada por un hecho puntual.

Este guía lleva trabajando 16 años con la compañía Bluefields la cual se dedica a organizar excursiones para jóvenes, expediciones a lugares de difícil acceso, sitios a los que comúnmente no visitamos en vacaciones. ¿Cuál es el valor de tal profesión? ¿Dónde reside la importancia de realizar ese trabajo? Bien, soy un joven bogotano, he vivido en esta ciudad durante toda mi vida y considero que muchos de los más grandes aprendizajes los he obtenido a partir de los diferentes viajes a los que he asistido. Las excursiones a las que acudí durante mi paso por el colegio siempre significaron una forma de crecimiento personal muy valiosa. Era una manera de adquirir conocimiento a partir de las vivencias, una forma de acercarme a realidades que son lejanas desde nuestra ocupada vida en la ciudad. Encontrarme cara a cara con Colombia, descubrir que fuera de Bogotá son cosas sustancialmente diferentes. Por ende, estamos llamados a trabajar por nuestra nación y este es quizás un entendimiento que me hubiera sido complicado adquirir sin la posibilidad que tuve de viajar con Bluefields.

Es innegable que lo ocurrido durante la excursión a Amazonas del colegio The English School, es realmente trágico. Pienso en la angustia que vivieron todos los que estaban allí presentes y por ende lamento profundamente todo el dolor que han tenido que soportar las personas cercanas a María Camila. Pero conozco a este guía y sé que hubiera dado su vida por evitar lo ocurrido; sé que los guías han soportado también el dolor de esta tragedia; sé que jamás tuvieron la intención de dañar a alguien y que si fuera posible regresar el tiempo y revertir lo acontecido lo harían. Si tuvieron responsabilidad o no, es algo que no me copete discutir, pero me interesa que conozcan la realidad de los que hoy son señalados como aparentes responsables de un homicidio culposo. Ante todo son personas, que además cumplían una misión fundamental para la sociedad, creo que debemos entender que no estamos ante criminales sino ante seres humanos que aparentemente cometieron un error, el cual pagaron muy caro. Aquí estamos ante una lamentable situación en donde a gente correcta le pasan cosas malas. María Camila no debería morir y sus padres no merecían soportar este duro golpe; sus compañeros no merecían padecer temor, y el guía no merecer cargar con esta pena.

Pero todos sabemos que el mundo no es un lugar profundamente justo, ¿Hasta qué punto un tribunal podrá pintar sobre este lúgubre lienzo, unos trazos de justicia? Es una pregunta muy compleja, y como estudiante de Derecho, entro en la contradicción imperdonable de preguntarme si una sentencia judicial puede solucionar de alguna forma el injusto desenlace de esta situación. Ante un juez es imposible argumentar con base en la integridad de una persona; es imposible que se expida un fallo que tome en cuenta el valor de la persona y que más allá de un aparente traspié pondere entre eso, la verdadera intención, el dolor con el que deben cargar éstas personas y lo que realmente representan para la sociedad. Tal vez, ese ejercicio de ponderación nos corresponde hacerlo a nosotros en nuestros corazones, tal vez es algo que deben hacer quienes guardan rencor contra los que probablemente sean señalados como “responsables” de lo ocurrido.

Quiero mandarle un mensaje a él y a los guías que lo acompañaron en ese triste suceso: les agradezco por darme la oportunidad, a mí y a muchos otros, de salir de mi zona de comodidad. Les agradezco por acompañarme en viajes que resultaron fundamentales para comprender que Colombia, a pesar de tener mil problemas, esconde una riqueza natural y humana que debemos saber apreciar. Lamento profundamente lo que les ha tocado vivir a raíz del catastrófico accidente. Supongo que solo los que nunca hacen nada de gran valor están exentos de equivocarse. Probablemente sea un juez quien determine la responsabilidad de los involucrados en lo ocurrido, pero creo que la opinión pública debe ser cautelosa y entender que nunca se obró de mala fe, que las personas llamadas a la imputación de cargos deben ser vistas de una forma íntegra.

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Nota Ciudadana
Cartagena de Indias: lo que hablan las murallas

Cartagena de Indias: lo que hablan las murallas

Nota Ciudadana
La mala salud de la salud

La mala salud de la salud

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--