El caso de Irma Franco, es uno de los más emblemáticos de los desaparecidos en la retoma del Palacio de Justicia, al igual que los empleados de la cafetería, a quienes en su momento los militares señalaron de ser miembros del M-19 sin que fuera una afirmación cierta. En el 2014 la Corte Interamericana de Derechos Humanos emitió desde Washington un fallo en que responsabiliza al Estado colombiano por la desaparición forzada de civiles en el marco de la toma guerrillera y la retoma por parte de las Fuerzas Militares.
Los familiares de Irma Franco, una de las desaparecidas, no dejaron dormir su caso y estuvieron presentes en todas las marchas, pero además atentos a que los procesos judiciales continuaran hasta el final.
El 16 de marzo de 2023, la Corte Suprema de Justicia dejó en firme una condena de 40 años contra el coronel retirado Edilberto Sánchez Rubiano por haber sido coautor de la desaparición forzada de tres personas, entre las cuales se encontraba Irma Franco, la abogada bogotana que por ese entonces militaba en el M-19, protagonista de los hechos ocurridos en noviembre de 1985 en el Palacio de Justicia. Ahora, por ese mismo caso, el general retirado Iván Ramírez Quintero también irá a prisión, pero su condena fue por nueve años menos.
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A Ramírez lo absolvieron por las desapariciones de Carlos Augusto Rodríguez Vera y Bernardo Beltrán Hernández, en las que sí fue responsable Sánchez, así como las de otras ocho personas, pero del de Irma Franco no se pudieron librar ni él ni el teniente coronel retirado Fernando Blanco, quien al igual que Ramírez fue condenado a 31 años, 10 meses y 15 días. Condena que se hará efectiva tan pronto la sentencia quede en firme y en la cual no contarán con el beneficio de casa por cárcel.
La realidad del coronel (r) Alfonso Plazas Vega es diferente
El oriundo de Sogamoso, el coronel de la policía, fue una de las personas que adquirió más reconocimiento durante la retoma al Palacio de Justicia gracias a su famosa frase "Aquí defendiendo la democracia, maestro". Fue condenado a 30 años de prisión en 2010, aunque ya estaba detenido desde 2007, pero la Corte Suprema de Justicia decidió absolverlo en 2015.
Ahora, desde Florida y apoyado por la defensa del férreo penalista Jaime Granados, Plazas Vega busca ser reparado por esos más de 8 años que alcanzó a estar encarcelado, al tiempo que enfrenta la presión de otro proceso que cursa en la Corte de Estados Unidos, donde reside junto a su esposa Thania Vega, excongresista del Centro Democrático.
Plazas Vega no está tranquilo porque este proceso impulsado por la hijas del magistrado Carlos Urán, en cabeza de Helena, avanza en el lugar donde reside.
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