El 22 de diciembre de 2020, el Director Nacional de Policía, Oscar Atehortúa salió de su cargo con aplausos presidenciales por sus méritos en la reducción de delitos a nivel nacional. Iván Duque nombró en su reemplazo al general Jorge Luis Vargas quien se venía desempeñando como director de Seguridad Ciudadana.
La salida de Atehortua se dio en medio de un juicio disciplinario en su contra de la Procuraduría General de la Nación por presuntos hechos de corrupción por su paso por la dirección del Fondo Rotatorio de la Policía en el 2011, en donde habría firmado unos contratos para la construcción de 60 casas fiscales en Tolima, las cuales hasta el día de hoy siguen embolatadas.
Desde enero del 2021, en los corredores del Ministerio de Relaciones Exteriores se habla del nombramiento del exdirector de la policía como embajador de Colombia en Canberra, Australia, cargo que ocupaba el general Alberto José Mejía, quien fuera el último Comandante del ejército del gobierno de Juan Manuel Santos y quien cumplió un rol clave en el proceso de negociación con las Farc, el cual le mereció el reconocimiento de Santos con el alto cargo diplomático. El nombramiento diplomático de Atehortúa se demoró precisamente por las indagatorias de carácter disciplinario que se desarrollaban en su contra en los despachos de la Procuraduría General.
Su hoja de vida ya se encuentra inscrita en la página de aspirantes de la Presidencia de la República y se espera que su nombramiento se haga efectivo en los próximos días. El general Mejía estaba cumpliendo una reconocida laboral en Australia, sin que se tuviera previsto ningún cambio. Uno de los respaldos importantes del general Atehortúa en el alto gobierno es Luis Guillermo Echeverri, una persona que sigue teniendo gran influencia en la Casa de Nariño.