No hay duda que El Desafío es el reality por excelencia de la televisión colombiana. Desde que se estrenó en el año 2004 ha sido el programa más visto durante su transmisión y con más de 17 temporadas es uno de los concursos más longevos de la TV nacional.
Ha sido tanto su auge que el año 2010, desde tierras gringas, productores de Univision decidieron hacer una versión para el país norteamericano. El Desafío: La Gran batalla reunió a concursantes de algunos países latinoamericanos y fichó como su conductor estrella a Michel Brown, el argentino reconocido por protagonizar Pasión de Gavilanes.
En esa época, Brown era uno de los famosos más cotizados de la televisión latinoamericana, venía de protagonizar el fantasma del hotel junto a Ana Lucia Dominguez, y ya estaba abriéndose puertas a productoras internacionales. Fue en ese momento cuando lo llamaron para ser presentador del reality y no pudo resistirse.
Durante cuatro meses, El Desafío: La Gran Batalla estuvo al aire pero sin los resultados esperados, no le fue tan bien como a su versión colombiana y ni siquiera Michel Brown logró mantenerlo a flote para una segunda temporada.
Tras finalizar el concurso, el actor buscó otros aires y retornó a la TV, pero como actor, estuvo en A Corazón Abierto, la novela más vista de la televisión colombiana, y a dia de hoy, sigue estando vigente para las productoras de contenido y está protagonizando la última serie de Netflix, Palpito.
Eso sí, mucho se quedaron con la imagen de Brown en El Desafío y lo confundieron an algunas ocasiones con el productor que, hasta el día de hoy, sigue apareciendo en las pantallas colombianas gracias al reality.
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