En un departamento como La Guajira, “donde lo que caracteriza al debate electoral es la cantidad de dinero que circula en las campañas, nuestra postulación a la propuesta a la alcaldía de Fonseca encarna también una nueva forma de hacer política”, dice Benedicto de Jesús González, firmante del acuerdo de paz entre las Farc y el Estado colombiano, y líder social quien hace unos años ocupó provisionalmente la curul de Jesús Santrich en la Cámara de Representantes por el entonces nuevo partido Farc.
Benedicto ha anunciado su candidatura para la alcaldía del municipio de Fonseca, en el departamento de La Guajira, y al igual que Guillermo Torres, mejor conocido como Julián Conrado (uno de los principales compositores musicales de las antiguas Farc-EP y primer exintegrante de esta organización armada en obtener un cargo por voto popular como alcalde del municipio de Turbaco-Bolívar en 2019), también considera que la población reincorporada “puede cumplir un papel transparente en la administración pública”.
De hecho, en las propuestas programáticas de esta candidatura se encuentran varios puntos que ya están definidos en el acuerdo de La Habana, por ejemplo, en el tema de desarrollo social, salud, vivienda, educación erradicación de la pobreza, “ya se cuenta con unos mandatos dados por el Acuerdo y que en el caso del municipio de Fonseca es entrar a cumplirlos”.
En los acuerdos de La Habana, por ejemplo, “está el fortalecimiento de la infraestructura, y la calidad de la red pública en las zonas rurales, e implementar el plan de salud rural, eso está en el punto 1.3.2.1 del acuerdo de paz firmado, la creación de un modelo de salud pública para zonas rurales, y un enfoque diferencial en el tema de salud rural”.
Lo claro es que esta candidatura, que cuenta con una base popular en La Guajira, se deberá desarrollar en medio de una grave situación de corrupción institucional, y descomposición administrativa, la cual es rechazada por la mayoría de la población del departamento.
Y es que este año por ejemplo un juez de la República condenó a cuatro exfuncionarios regionales por hacer uso de $18.900 millones de pesos para una campaña política cuando estaban dirigidos a evitar la mortalidad de niños y madres gestantes. El departamento de la Guajira, además, es la líder nacional en obras inconclusas dado el robo de los recursos en temas como acueducto, vivienda, infraestructura vial, y alcantarillados.
Baste recordar que este departamento ha tenido 12 gobernadores en los últimos diez años, pérdidas por $17.000 millones en el Programa de Alimentación Escolar, quince mil niños guajiros sin educación, y otros quince mil en situación de desnutrición por falta de recursos básicos.
En este contexto es que se desenvuelven por lo general muchas propuestas comunitarias, que junto con población reincorporada defienden el territorio y el medio ambiente en la región. Por eso una de las banderas del firmante de paz Benedicto González, es “el compromiso con los procesos de resistencia a los proyectos de las multinacionales en la región, sobre todo con las del carbón que han intentado, por años, desalojar de sus lugares ancestrales a las comunidades, y acabar con las fuentes hídricas como ocurre en el centro y sur de La Guajira”.
Benedicto González integra, junto con organizaciones comunitarias y otras personas en proceso de reincorporación a Avanzar, una serie de nodos de trabajo comunitario en La Guajira y en otras partes del país que reivindican la necesidad del cumplimiento del acuerdo de paz firmado en La Habana por parte del Estado colombiano, lo cual hoy por hoy es esencial en las propuestas de muchas comunidades y organizaciones sociales en el país, ya que como lo plantean los mismos excombatientes, el acuerdo se pensó desde criterios, como los niveles de pobreza, salud, educación y afectaciones por el conflicto, y por eso “170 municipios del país fueron priorizados, para la implementación de los recursos de la paz, y el municipio de Fonseca es uno de esos municipios PDET (Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial)”.
De acuerdo con González “Allí la comunidad posee un conocimiento profundo de las problemáticas, y cuenta con las condiciones para que un alcalde comprometido con su pueblo, y las necesidades de las comunidades, pueda hacer una gran gestión”.
Propuestas como devolverles a los grupos motor de los PDET “la función de vigilancia y control de los recursos destinados a la paz”, devolverle al campo la vocación agrícola, entregarles a los campesinos las herramientas y condiciones técnicas para que sean protagonistas en la reactivación de la economía, y priorizar en Fonseca La Guajira la producción de alimentos en lugar de proyectos mineros; hacen parte de esta candidatura para las próximas elecciones en 2023.
Buena parte de los reincorporados de la Guajira, y de otras partes del país, exigen al Estado colombiano la garantía en el cumplimiento de los acuerdos que benefician a la sociedad en su conjunto, y a los firmantes de paz, en el contexto de un proceso de reincorporación y no de reinserción.
De allí que ellos mismos hayan ido desarrollando el concepto de reincorporación comunitaria, la cual “prioriza el beneficio, interés y necesidades de las comunidades”, y ha permitido que en la actualidad se estén ejecutando en varias zonas del país proyectos conjuntos entre excombatientes y comunidades, como lo es el proyecto basado en la producción de alimentos, huevos, pollos de engorde y hortalizas y que involucra varias veredas y el casco urbano de Fonseca La Guajira.
*Esta reseña fue elaborada por el equipo de prensa del ETCR de Pondores, Conejo, La Guajira.