El acuerdo llegó, tras dos días de intensas negociaciones, en la madrugada de este viernes. Se trata de un pacto sin precedentes, el primero de este tipo en los últimos 30 años.
"Es una respuesta de la política con mayúscula, que piensa en Chile y que también se hace cargo y asume su responsabilidad", afirmó el presidente del Senado, Jaime Quintana, miembro del opositor Partido por la Democracia (centroizquierda), flanqueado por los dirigentes de las principales formaciones políticas del país, a excepción del Partido Comunista, en una conferencia de prensa de madrugada en una de las sedes del Congreso en Santiago.
“Nosotros estamos contentos de haber podido contribuir a aprobar un acuerdo que derrote la violencia", afirmó Jacqueline van Rysselberghe, presidenta de la ultraconservadora Unión Demócrata Independiente (UDI), el principal partido de la coalición de partidos del gobierno de Sebastián Piñera.
En este pacto, un amplio espectro de las fuerzas políticas en el Congreso acordaron convocar a un plebiscito en abril de 2020 en que se preguntará a los chilenos si quieren o no una nueva Constitución y qué tipo de órgano debiera redactar la Carta Magna.
Se presentan dos opciones para esta pregunta: la primera, una convención mixta constitucional integrada por partes iguales de miembros elegidos para tal efecto y parlamentarios en ejercicio. La otra opción es una convención constitucional en la que los miembros serán elegidos integralmente para cumplir con esta misión por parte de la ciudadanía.
La redacción de cada capítulo de esta nueva Constitución deberá ser aprobada por un cuórum de dos tercios de los integrantes del órgano redactor.
Una vez redactada la nueva Carta Magna, ésta será sometida a un plebiscito revocatorio mediante sufragio universal.
El gobierno, en el centro de las críticas desde hace un mes se felicitó por el pacto acordado entre el oficialismo y la oposición. Por otra parte, el Ejecutivo no aclaró si en paralelo se discutirá una agenda social que no necesita la plataforma constitucional para su puesta en marcha.
Si el proyecto es aprobado en plebiscito, la elección de los miembros de una u otra instancia se realizará en octubre de 2020, coincidiendo con las elecciones regionales y municipales bajo sufragio universal y se hará con voto voluntario.
El acuerdo se alcanzó tras casi un mes de protestas para reclamar profundas reformas sociales al gobierno. Las manifestaciones estuvieron acompañadas de episodios violentos que dejaron 22 muertos y miles de heridos y detenidos en multitudinarias manifestaciones callejeras, saqueos, incendios y enfrentamientos con la policía.
*Con Paula Estañol, enviada especial de RFI a Santiago
**Artículo originalmente publicado en Radio Francia Internacional.