Como si fuera el mismísimo rancho de Vicente Fernández, la ambiciosa pareja no paró hasta tener su monumental centro de eventos en la capital colombiana. Con menos de 30 años de edad pudieron materializar en meses el sueño para el que les tocó poner sus ahorros de más de 10 años de carrera. Y como si su destino fuera encontrarse para volverse millonarios, en solo tres años de relación pueden asegurar con orgullo la familia e imperio que han logrado construir.
La idea les llegó en pandemia, Pipe perdió todos los shows que tenía planificados al igual que las ganancias que venían con ellos; ante su urgencia de sostener a su familia e hijo recién nacido ambos le sacaron provecho a su amor por la cultura mexicana, su gran ambición les permitió visionar el lugar de sus sueños, pero les faltaba uno de los recursos más importantes: plata. Dos socios llegaron para potenciar su sueño y brindarles la localidad para muchos perfecta. Los dueños de Plaza MX, principal restaurante que sería la competencia directa de la idea de Pipe y Luisa, se convirtieron en los socios inmediatos de la pareja que supo perfectamente sacarle provecho a los más de 25 años de experiencia de los empresarios Andrés Felipe Gutiérrez, su esposa Carolina Rojas Newton, y Édgar Ricardo Rojas.
La construcción se dio a ritmo acelerado, en solo cinco meses Rancho MX abrió sus puertas pero antes de hacerlo al público lo hizo solo para las celebridades de todo el país. Fue la misma Luisa Fernanda W quien se encargó de enviar las invitaciones a cada famoso y restregó al resto de los colombianos su privilegio que justo en ese momento muchos envidiaron: más de uno quiso pisar el mismo lugar que tantas estrellas visitaron en solo una noche. Evento en el que la pareja derrochó millones de pesos en comida y licor para recibirlos pero también para utilizar las redes y miles de seguidores de cada uno de ellos en publicidad. Estrategia que les funcionó a la perfección, pues durante todo un fin de semana era lo único de lo que se hablaba: “la fiesta en la que se emborrachó Lina Tejeiro hasta vomitar”, “Los besos que repartió Epa Colombia a otras mujeres”, los titulares con un denominador común, todo sucedió en el nuevo y lujoso restaurante ubicado en la Variante Cajicá, Rancho MX. Conózcalo en este video:
Claro que tener de dueños y caras representantes a dos figuras tan famosas como Luisa y Pipe funciona, pero el mayor atractivo del lugar son sus instalaciones, en las que sus accionistas no escatimaron en gastos. Al mejor estilo de Pasión de Gavilanes los caballos pasan a ser otros protagonistas del Rancho, palabra que traduce en la cultura mexicana a algo similar a una hacienda, finca o mansión. En su gran terreno campestre y de estilo colonial, el lugar cuenta con una capilla, un salón principal donde queda el restaurante que además tiene una tarima, fuentes de agua, una granja, trajineras para atención personalizada y tres salones más con otros servicios como bar, churrería y tacos. El complejo también cuenta con una guardería y una plaza de toros que sería el primer “palenque” en Colombia, dedicado solo para conciertos; pero la misma alcaldía municipal selló la construcción del lugar para proteger la vida de los animales y luchar contra el maltrato animal. Con una variedad de comidas y licores de su propia autoría, los precios del menú van desde los 14 mil pesos hasta los 290 mil pesos colombianos.
Ni un año lleva inaugurado Rancho MX y ya es uno de los lugares preferidos por muchos colombianos y hasta extranjeros, el mismo embajador de México en Colombia, Alejandro García-Moreno Elizondo, visitó el restaurante y entregó a sus propietarios la bandera para izarla en las instalaciones. Al lugar no solo se le considera como uno de los epicentros de la vida nocturna y conciertos, también es el escogido por muchos para desayunar por solo 75 mil pesos colombianos, un gangazo para los más ricos pero una exageración para los más corrientes; pasar un domingo en familia y hasta ir a las misas que ofrecen, que también ambientan para otros festejos religiosos como bautizos o matrimonios.
Sus cocineros mexicanos son otros de sus mayores activos, además de su buen equipo de atención al cliente que muchos aplauden y que reconocen con grandes propinas. Muchos trabajadores y el mismo cantante de música popular recordó que en solo el primer mes de abrir al público, los meseros lloraron con las propinas que obtenían, un pago que jamás habían tenido en sus vidas y uno de los mayores motivadores para los meses siguientes. Y es que la cantidad de empleo que generan no es mínima, así mismo como son sus entradas, el negocio apoya a más de 200 familias, son casi 300 los colaboradores que prestan sus servicios en Rancho.
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