Creo que la respuesta a sobre “qué hacer con la educación hoy” es una sola: lo ADECUADO. El problema es que, aquello que debería ser ADECUADO, parece ser algo utópico, a la luz de la escasez de valores predominante en el mundo académico de hoy, en el que pasamos de la cordialidad simple entre educandos y educados, a la confianza excesiva y al irrespeto fácil. Volviendo al tema, especulemos algo, sobre lo que considero, ADECUADO.
Primero debemos hacernos unas cuantas preguntas algo simplistas: ¿tenemos el docente ADECUADO? Es decir, por su preparación pertinente y actualizada; por un salario digno acorde con su tarea de formar a una nación; por un estatus social de respeto a su oficio, que lo motive y lo afecte en forma positiva como pilar de la comunidad. De acuerdo con estas premisas básicas, ¿desde el Estado y su entorno académico, se le da el respeto ADECUADO al maestro?
Y ¿Se le da el acompañamiento ADECUADO, para convivir diariamente con los problemas que le lleva el estudiante, desde la calle y/o desde el hogar, pero que se decantan en el aula?
¿Trabajan los maestros en condiciones locativas seguras y dignas de su labor magisterial? Es decir, ¿ADECUADAS? El ambiente estudiantil sano, es parte de una educación sana.
Pero, además, ¿podemos tener una educación ADECUADA: ¿es decir, útil y práctica, enfocada por vocaciones y necesidades específicas de un territorio o de su aparato productivo, donde se genera el empleo, aquello que justifica educarse? Esto no es más que una EDUCACION UTIL, sin “arandelas de relleno” es decir, limpia de polvo paja. Necesitamos una educación que haga inventario real de QUE, CUÁNTOS y CUÁLES, son los requerimientos en ciencias y oficios, en cada territorio y área del Mercado. Es decir, la educación de hoy, debe de ir con la época y la necesidad de la economía y la sociedad en general. ESO ES ADECUADO. No se trata de tener muchos técnicos o profesionales, sí el Mercado para sus saberes…NO EXISTE.
Tener tantos “graduados” sin empleo no tiene gracia. ¿Así que, entonces, qué es lo adecuado?
Responder a esto, es difícil, y osado, porque parece que ninguno de los tópicos exigidos, para virar el rumbo, se cumple a cabalidad. Más aún, ni siquiera “adecuados” que salen tan baratos y fáciles de cumplir, como aquello de volver por al respeto por el maestro y el alumno.
ADECUADO es darle al docente y al educando su estatus. Es que ya no existe el señor maestro y/o señor profesor, que inspiraba y merecía el respeto del estudiante y la comunidad. Aquello desapareció, y ahora es simplemente el PRO, y cuando se es, más generosos… profe. Digo, si aún hay algo de respeto en el alumno. Eso NO ES ADECUADO. No se trata de volver arcaica la educación, no señor, se trata de hacer algo más, unos ciertos relacionamientos con sello ético, por el bien de toda la comunidad educativa. Que cada loro esté en su estaca. El respeto.
¿Son ADECUADOS y PERTINENTES los pénsum actuales, a nivel general, o les sobran florituras académicas y materias “colaterales, insulsas, ¿inútiles e inanes”? Esas que, más que enseñar, enredan al alumno y lo desvían del aprendizaje práctico, enfocado, real y útil. Porque, por entre la maraña de “temas conexos” a un ciclo educativo específico, muchas veces, se cuela la frustración del alumno, por “estar viendo cosas que no voy a necesitar” La solución puede ser que, desde el Congreso, se impulse una REFORMA ADECUADA a los parámetros mencionados, que, no es otra cosa, que “ir a lo que nos trujo” Una reforma única, en el tiempo ADECUADO; los temas adecuados, que agoten el tema. Que no empantane ni llene de obligaciones académicas exógenas los años de estudio, a cualquier nivel. Educación de hoy y para hoy. Sí pretendemos volverla no solo gratuita, sino completa y de utilidad real, debe estar enfocada en darle al estudiante, exclusivamente, la información y formación que necesita y que le será más útil; con el conocimiento puntual y pertinente para practicar la vida según sus habilidades y potencialidades. Que contenga, primordialmente, lo que el estudiante quiere y el Mercado Laboral de su territorio, realmente necesita. Es decir, educación enfocada y ADECUADA a las claras necesidades tecnológicas, sociales y económicas del país de hoy, con la especialización y el enfoque práctico que el Mercado Laboral y las opciones económicas del Desarrollo, exigen.
ADECUADO, es tener enfoque práctico según la vocación de cada territorio en sus necesidades sociales, laborales y económicas. No es rellenar programas académicos con temas irrelevantes, improcedentes, y no utilitarios, carentes de pertinencia alguna en la vida real, la vida laboral. ¿Para qué te matan con el álgebra y el cálculo, si vas a ser médico? Pertinencia y praxis. Lo ADECUADO. Vocaciones en primer plano. ¿¿por qué, estudiar piano, sí para lo que eres bueno es para la guitarra?? APRENDE GUITARRA. Por otra parte, pero muy importante y ADECUADO: tener Maestros bien pagos y a tiempo. Maestros que estén en formación continua, focal, útil. Profesores actualizados y formados en técnicas efectivas de retroalimentación educativa. Esa que exigen los tiempos y la sociedad de hoy.
Un tema, MUY ADECUADO: el docente, debe tener una altura ética propia del efecto espejo: la da y recibe. Altura social, propia de su estatus como herramienta constructora de la sociedad de su tiempo. Del respeto, por su condición de formadores del material humano que pasará al bate en las distintas instancias vivenciales, cotidianas y la conducción y gestión futura del País. Debe tener un sitio social relevante. Bajo estas circunstancias, debe exigir y recibir el respeto ADECUADO por parte del alumno, al que tratará con igual cortesía, creando así, la cultura del respeto-espejo. Ambos deben: dar y recibir de lo mismo. Al maestro la consideración que merece por su condición de guía social. El alumno, por su cultivo en Valores, a cualquier nivel, debe recibir un trato de respeto y cortesía tales, que lo “obligue” a revisar su clara relación de asimetría social y humanista, con respecto al Maestro. Recuerdo que, a mí, los profesores, me llamaban, señor Hernández, a pesar de que apenas alzaba 160 centímetros del piso. En síntesis, un maestro adecuado a la época, a las necesidades de una pedagogía moderna y a la adecuada formación que cada vocación, exige. El resultado sería una educación adecuada.
La respuesta final, es que cada uno de los actores del tema en educación debe hacer lo ADECUADO. Congreso- Gobierno- Academia- Fecode, Asociaciones de padres etc.