Vaneza Peláez era la presentadora más querida de la televisión nacional gracias a su participación en el emblemático programa Sábados Felices en el que estuvo durante 8 largos años. Era talentosa y bella, su vida transcurría sin mayor preámbulo hasta que la Dijin de la policía irrumpió en su penthouse en El Poblado de Medellín en la madrugada del 8 de febrero de 2018 en búsqueda del papá de sus dos hijas: Sebastián Murillo Echeverri, alias Lindolfo. Su pareja durante más de una década se presentaba como un próspero empresario y hombre de negocios pero realmente era nada más y nada menos que el jefe de cobros de la Oficina de Envigado.
Las cámara inundaron el penthouse, y fue noticia en el Prime Time de Caracol Televisión, el esposo de la presentadora y modelo Vaneza Peláez capturado por líos con narcotráfico, una historia que será ni la primera ni última en Colombia. A pesar del escándalo y de la sentencia que condenaron a 18 años de cárcel a alias Lindolfo, la presentadora se mantuvo en el canal, pero no duró mucho, la presión y chismes terminaron causanda su renuncia. Hoy se dedica a sus hijas y a promocionar diferentes marcas por sus redes sociales.
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