Desde que dejó lacembajada en Mexico el 30 de agosto del 2015 decidió no regresar a Colombia y aceptar la propuesta de Carlos Julio Ardila de ser el representante comercial de la organización Ardila Lülle en esa capital. Vive en su apartamento en Las Lomas, el exclusivo barrio de Ciudad de México., com su segunda esposa, Diana Van Meerbeke y su hijastro Tomas, avezado chef que tiene la costumbre de sorprenderlo cada día con un plato exótico. Con su primer matrimonio, Maria Elvira Samper también tuvo un hijo, Andres, que además es chef.
Pero el confort no le ha quitado las ganas de ayudar a los colombianos que pasan penurias en México. Es que en los últimos días el maltrato que le ha dado la policía de Andres Manuel López Obrador contra los colombianos que llegan al Benito Juárez se ha disparado. Una de las pocas ayudas que tienen ellos está en el querido José Gabriel Ortiz.
Durante más de una década José Gabriel Ortiz fue el amo del talk show en Colombia. Aunque nunca estudió periodismo —es Ingeniero Civil de los Andes— su experiencia en medios tal vez empezó desde la fría tarde de marzo de 1972 cuando se casó con la periodista María Elvira Samper, entonces profesora de Filosofía en el Colegio Colsubsidio.
En esa época vivían en un apartamento de 70 metros cuadrados en el barrio El Polo de Bogotá. Tenía un jeep que le regaló su papá Gabriel Ortiz, un cafetero de origen paisa y con él iba a mercar a una hacienda alemana que a comienzos de los años 70 tenían unos alemanes en la Avenida Suba con Calle 100, justo donde queda ahora Iserra y luego a rumbear a la carrera 13 con calle 43 a La Discotheque, el mejor rumbeadero de Bogotá cuyo dueño también era de dos íntimos suyos, Juan Antonio Sanint y Enrique Santos Calderón.
Nadie duda de que el éxito de José Gabriel ha sido su carisma, su capacidad de tener amigos. Sin embargo, el ser “el rey de la fiesta” como lo bautizó la propia María Elvira Samper, le costó su primer divorcio en 1978. En esa época su amigo Guillermo Perry le había conseguido un trabajo aburridorsisimo en Planeación Nacional, en la Unidad de Investigación Operacional en donde le tocaba hacer cuentas en una oficina y cuyo único consuelo era un sueldo de más de $ 4 mil pesos.
Del aburrimiento lo salvó otro de sus amigos, Felipe López, quien le propuso embarcarse en la aventura de crear Programar Televisión para que fuera el Gerente. La joya de la corona de esa programadora era el Noticiero de las 7 presentado por Juan Guillermo Ríos. Entre 1983 y 1987 fue el rey de la audiencia.
Ha aguantado bien el tren de vida que lleva, un yuppie cuya principal virtud es ser el centro de atención de las reuniones más encopetadas es por eso que en 1993 el entonces ministro de Comercio Exterior, Juan Manuel Santos, le propuso abrir la primera oficina de Proexport en Europa. Madrid fue durante muchos años el centro de operaciones de José Gabriel, por esa época abrió su propio negocio de exportaciones hasta que el propio Carlos Ardila Lulle, cuando recién arrancaban los canales privados, lo llama para que presente un programa que sería el primer Late Show de la televisión nacional.