Sebastián Castrillón había sido delantero en el Envigado Futbol Club, estaba por ser fichado por el Racing de Argentina y soñaba con ser el próximo astro del balompié colombiano, pero días antes de viajar tuvo un accidente que le produjo un trauma encefálico que afectó el 80% de su motricidad. Entonces, el dueño de NEA, tenía quince años.
Al no poder caminar, buscó nuevas formas de moverse y fue así como se ingenió su marca de ropa llamada NEA (No Existen Atajos). Comenzó su emprendimiento con apenas cuatro camisetas y una inversión de 200.000 pesos y como todo emprendedor pospandémico, entendió que sus redes sociales serían sus mejores aliadas para promocionarse.
Pero despegar es difícil, Castrillón ofrecía sus productos en todos los lados que visitaba, los mostraba a sus amigos, conocidos, pero la competencia era mucha. Así que tuvo la idea de ir a un evento en el que el famoso influencer Yeferson Cossio se presentaba y regalarle una gorra y una camiseta de su marca NEA. Sebastián no tenía entrada.
El empujón que le dio Yeferson Cossio
Yeferson Cossio es un millonario que no sólo se ha destacado por diversas polémicas, sino también por hacer obras benéficas con niños, adultos de la tercera edad y animales. Una de las más recordadas, fue cuando recaudó dinero para comprar una casa para una mujer de 88 años que fue víctima del conflicto armado y que tiene una hija con discapacidad.
Sebastián tuvo suerte, una de las guardias de seguridad lo conocía y lo dejó pasar. Además, cuando Yeferson lo conoció, estuvo encantado de atenderlo y de recibir su regalo. El joven que ahora es dueño de una millonaria marca, le contó al influencer que no tenía plata y que sólo le quería regalar unas prendas de su emprendimiento.
Cossio sacó su celular, publicó una historia y las redes de Castrillón explotaron. Una publicación del influencer puede llegar a costar hasta 15 millones de pesos colombianos.
Los pedidos por WhatsApp llegaron por decenas y el emprendedor apenas tenía ocho camisetas en stock.
El crecimiento de NEA
NEA se disparó en apenas cinco meses, según su creador porque se movió rápido para buscar empresas aliadas y distribuidores que estuvieran al nivel de lo que quería para su empresa.
Sebastián Castrillón cambió su sueño de ser futbolista, por otro sueño, el de ser un emprendedor exitoso que tiene una empresa millonaria con un impacto positivo en la comunidad. En la actualidad, el astro del futbol colombiano, James Rodríguez, es una de las estrellas que visten ropa de su marca.
Su ropa también la ha lucido el reggaetonero Ryan Castro, quien fue a visitar a Sebastián Castrillón a un evento de posicionamiento de marca que el empresario hizo hace pocos meses. El intérprete de “Monastery” o “Quema” se ha mostrado en varias publicaciones con la indumentaria de NEA y otros reggaetoneros como J Álvarez o Miky Woodz también han lucido sus prendas.
El empresario piensa en la posibilidad de expandirse a otros países, principalmente Estados Unidos, pero enfatiza que para él es mucho más importante expandirse en Colombia, donde ya tiene presencia en más de 45 tiendas.
Han pasado siete años desde el accidente y su marca NEA tiene ingresos que superan los 1.000 millones de pesos. Entre sus empleados, cada vez hay más personas con discapacidad y su objetivo es ser una empresa textil que lidere la contratación de colaboradores con esta condición.
