Según reporta la emisora La Cariñosa, de RCN Radio, un grupo de 41 jóvenes fue descubierto en una rumba de tres días que se desarrollaba en una casa hotel. La policía dio con la fiesta porque un domiciliario denunció la situación. El hombre habría llamado la policía porque los jóvenes no le pagaron un pedido de trago.
En total fueron 23 hombres y 18 mujeres los que fueron detenidos por la policía. Entre estos, habrían varios menores de edad.
Después de recibir la denuncia, los policías se dirigieron hacia la residencia ubicada en la Calle 117 con Carrera 9 en la localidad de Usaquén, en Bogotá. Al tocar la puerta no obtuvieron respuesta. Por lo tanto, se vieron obligados a romper el candado e ingresar a la vivienda.
En el domicilio se encontraron botellas que evidenciaban consumo de alcohol, según pudo verse en imágenes difundidas por Noticias Caracol. Los agentes encontraron a un individuo de 30 años que cumplía pena domiciliaria por porte ilegal de armas en la residencia. El hombre violó la medida.
Los asistentes a la fiesta fueron multados cada uno con comparendos por $936.320 pesos y trasladados a la URI de Puente Aranda, donde se les imputaron cargos por violar la cuarentena.