La tarjeta débito llena de 'divis', la moneda con la que le Diversity le pagaba a los niños por trabajar en su ciudad miniatura era la alegría de los chicos y hasta la de sus papás. En este parque temático que hace dos años ceerró sus puertas, los niños podían ser periodistas, médicos, astronautas, bomberos, trabajar en fábricas haciendo chocolate, otros eran conductores y constructores.
Este memorable y muy recordado parque era el mejor de todos los de diversiones para niños. Era el único donde se sentían grandes por un día en sus vidas y no tuvo un final feliz. Se acabó en medio de crisis económicas. La pandemia terminó de derribar sus cuentas, que ya estaban desinfladas por la poca visitas de sus clientes. Los niños de ahora tienen otros gustos y los juegos de este parque de diversiones ya no eran de su interés.
Diversity tenía tres parques en Colombia. En agosto de 2020 cerró su gran parque temático en Medellín, que era de más de 2.900 metros y tenía 15 atracciones y 15 juegos de roles. La sede de Medellín que estaba en el centro comercial Santa Fe, recibía anualmente a 300 mil visitantes. En los últimos años este número se había venido reduciendo, hasta que sus finanzas no aguantaron más. La magia se le fue acabando. Primero había sufrido un recorte de sus instalaciones, hasta que decidieron no perder más y cerrarlo por completo.
En Bogotá esta ciudad en miniatura recibía medio millón de niños al año, y en las sede de Barranquilla también ingresaron unos 300 mil en sus mejores días.
Un mes después el Diversity de Bogotá, ubicado en el norte de la ciudad, en el centro comercial igualmente llamado Santa Fe, también cerró sus puertas. Tras no soportar las millonarias pérdidas cerraron operación. Solo queda abierto el parque Diversity de Barranquilla.
Diversity abrió en 2006 en Bogotá. Fue en su momento el más visitado por los niños de la ciudad y la sabana bogotana. En 2010 anunció sus nuevas instalaciones en Medellín, Barranquilla y en Lima, capital de Perú. Los planes de expansión para después de 2020 quedaron en ilusiones, que consistía en armar tiendas en Ibagué, Popayán y Bucaramanga.
Esta marca no fue la única de entretenimiento que cerró sus puertas. La Asociación Colombiana de Atracciones y Parques de Diversiones (Acolap) informó que por causas como la pandemia y falta de visitantes, 40 empresas de diversiones y entretenimiento de las 220 que tenían registradas le dijeron adiós al negocio. Un duro golpe para los niños y sus familias.