Tomando datos del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación como del Sistema Nacional de Información de Educación Superior (SNIES) para el año 2022. El Estado colombiano pasó de tener 8 programas de doctorado activos en el año 1993 a 86 en el año 2008 y 382 para el año 2019. De la misma forma, se ha incrementado de 1.5 doctores graduados por millón de habitantes para el año 2000 a 3.0 en el año 2008 y a 12.6 en 2016.
Así mismo, y entre comillas, dado la precariedad de ejercer el doctorado en Colombia, el país pasó de 913 beneficiarios en el período 1992- 2008 a 12.954 en el período 2009-2020. Es decir, cada vez hay más doctores, PhD, que, con sus competencias, mejoran la competitividad del país como transforman y acrecientan el acervo científico como la reconfiguración de los tejidos sociales colombianos.
Al compararnos con el mundo los rezagos de Colombia son abrumadores. A datos del año 2017 hubo 16 doctores por cada millón de habitantes. Muy por debajo del primer lugar que lo ocupa EE. UU. con 200 doctores por cada millón de habitantes. Aún más, si se identifican datos para 2019, solo habían 13000 personas con título doctoral y deberían de ser como mínimo 45.000. Sin olvidar, que la gran mayoría de los doctores laboran en universidades y muy pocos en el aparato productivo.
Ahora bien, entonces, ¿qué es un doctorado y para qué sirve?
Los doctorados o los PhD son los últimos escalones del estudio formal. Un doctor es una persona que genera una tesis, es decir, nuevo conocimiento y con ello contribuye a pasar milimétricamente la frontera del conocimiento y con ello en ampliar la riqueza científica de un país. Los doctores son la vanguardia de la investigación pertinente y de calidad que con sus estudios ayudan a mejorar según la línea escogida a la sociedad en su conjunto.
Por ello, un país que le apuesta a la formación doctoral es una sociedad en promedio con mejores relaciones económicas, políticas y sociales. No obstante, realizar un doctorado significa un esfuerzo no solamente económico por el costo de las matriculas en Colombia o en el mundo sino también por el cansancio, los odios y amores que se generan cuando se desarrolla.
En efecto, el desgaste de realizar un doctorado en Colombia es tal que luego de realizar los trabajos de campo, los contrastes de métodos y metodologías, las revisiones exhaustivas de jurados, directores, en promedio los egresados tienden a generar un cansancio intelectual, es decir, a quedarse postrados mentalmente por un tiempo dado las contingencias, divergencias, asimetrías y simetrías de realizarlo.
Realizar un doctorado, si es que lo logras terminar porque hay una gran deserción. Son un arrojo extraordinario cognitivo, corporal que se traduce en trasnochadas, en sinsabores, pero sobre todo en una emoción cuando por fin logras defender tu tesis y reflejar que los cinco o lo seis años desarrollándolo valió la pena y contribuyes a la sociedad. No solo con la critica que es lo más fácil, sino que con tu tesis puedes solucionar problemáticas en virtud, que la investigación inicia con el doctorado.
