El tema del decrecimiento no es nuevo. Ya en 1972 miembros de la revista The Ecologist presentaron el Manifiesto para la supervivencia, en el cual invitaban a adoptar medidas urgentes y drásticas la carrera de la humanidad hacia el caos ecológico.
El crecimiento descontrolado de la economía y de la población no han hecho otra cosa que acrecentar los males que aquejan a nuestra sociedad: delincuencia, criminalidad, vandalismo, drogadicción, etcétera... Síntomas todos del hundimiento del modelo cultural, económico y político. El modelo neoliberal vigente solo ha permitido una concentración excesiva de la riqueza y profundización de la pobreza y miseria de los pueblos.
No es solo la minería la causa del desastre ambiental que vive el mundo actual. La nueva era, el antropoceno, terminó ideado por Paul Crutzen, "esta marcada por una aguda modificación de los ciclos de la biosfera, por el maquinismo y el productivismo, y por la tecnología que los combustibles fósiles han permitido aprestar".
Existe una relación obvia entre la perspectiva del decrecimiento y el anuncio de un colapso general que podría estar próximo, señala Carlos Taibo en sus libros Colapso y decrecimiento. Una propuesta razonada, de lectura obligatoria para quienes estén interesados en los temas del cambio climático y las crisis del capitalismo neoliberal.
Para avanzar hacia un mudo sostenible y justo, con recursos limitados, no parece que tenga mucho sentido mantener la sociedad consumista de crecimiento ilimitado que no tiene en cuenta los efectos ambientales y las necesidades sociales. Ted Trainer, en La vía de la simplicidad, analiza los factores que han llevado a la insostenibilidad multidimensional, no solo material, sino también social y cultural.
En consecuencia, propone construir una forma de "vivir mejor con menos", una vida hacia la simplicidad caracterizada por "economías de pequeña escala, autosuficientes, bajo control social, sin crecimiento y orientada a satisfacer necesidades reales en lugar de al lucro". No más.
Profundicemos en su estudio con el propósito de emprender caminos que lleven a mayor bienestar de la población. Hay que cambiar.