El 24 de febrero, el Consejo Regional Indígena del Cauca –CRIC- convoca y reúne a los pueblos, comunidades y autoridades indigenas del cauca y Colombia para conmemorar esta vez 44 años de lucha, resistencia, permanencia y vida organizativa. Es un encuentro con la memoria, con la experiencia, con el caminar incansable de mayoras, mayores, hombres y mujeres que creyeron posible la reivindicación de los derechos, el fortalecimiento de la cultura y la libertad de los territorios a través de la unidad y la resistencia.
Convocamos a las comunidades de los diferentes pueblos indígenas y no indígenas, para afianzar los lazos de hermandad y unidad, al mismo tiempo para rendir un homenaje colectivo y espiritual a quienes físicamente no nos acompañan, pero su espíritu continúa animando el camino de lucha. Los y las recordaremos por su incansable fortaleza para defender la vida y mantener el territorio. “volver acción la palabra”, es darle vida a la palabra de nuestros mártires, traer al presente sus saberes y principios, los mantendrá vivos entre nosotros, sus enseñanzas de vida permanecerán en la memoria de todas las generaciones, para que el sueño de unidad entre los pueblos se alcance y se fortalezca.
Que sea esta minga colectiva es el momento apropiado para retomar la fuerza y la sabiduría del caminar como pueblos. 24 febrero de 1.971 – 24 de febrero del 2015. 44 años de experiencia vivida a través de la lucha y la resistencia, conforman la vida organizativa del CRIC, una de las organizaciones indígenas más relevantes del país y Latino América.
Cada momento del caminar organizativo, trajo consigo amenazas y grandes desafíos, de igual manera se alcanzaron algunos logros. Gracias a significativos líderes y lideresas que han legado a los pueblos, principios y sabiduría. Juan Tama de la estrella, “hijo de la estrella y la laguna”. Señalo a los Paeces ahora pueblo Nasa. Las leyes de origen como camino fundamental, en la recuperación de nuestra identidad, principio de vida como hijos e hijas de la madre tierra que caminan la palabra en unidad.
Las mujeres del proceso indígena, generadoras de vida y permanencia cultural, rememoran la valentía y lucha de la Cacica de la Gaitana, quien mediante la unidad de los pueblos, derroto la codicia española, su fuerza y dignidad de mujer la sintió y la vivió el temible conquistador Pedro de Añasco, que por haber asesinado a su hijo, tuvo que padecer la furia de una mujer originaria.
El líder indígena Manuel Quintín Lame, heredó a los pueblos indígenas su inquebrantable lucha por la tierra y la importancia de conocer las leyes para apuntalar sus luchas. Así mismo la capacidad de movilización, las famosas quintinadas, que hicieron temblar a los terratenientes y gamonales de Tierradentro.
De igual importancia, conmemoramos el significativo aporte y lucha de tod@s aquellos personajes que sin ser indígenas, le apostaron al proceso y entendieron la justa lucha de los pueblos, ofrendando sus vidas por el sueño de la organización indígena. Recordamos al líder agrario Gustavo Mejía, el Padre Pedro León Rodríguez, Luis Ángel Monroy (“Moncho”), Jaime Bronstein, Oscar Elías López entre otros.
De las entrañas del territorio Yanakona descansa el espíritu del líder Gregorio Palechor, a él le debemos la creación del programa jurídico del CRIC, un pilar fundamental de las luchas indígenas por la tierra. El fortalecimiento del ser indígenas y la espiritualidad, aspectos que siempre inculcaba el Padre Álvaro Ulcué Chocué, el querido Nasa Pal quien a través de la religión que sometía a los pueblos, libero el espíritu del ser indígena. Anatolio Quirá, un ejemplo de honestidad y entrega por la causa colectiva, un líder orgánico que germino y ahora descansa en las tierras del pueblo Kokonuko.
Los principios de lucha, dignidad y resistencia de los pueblos no tiene precio, es la herencia de vida y permanencia que los mayores y mayoras nos transmiten con sus luchas a las nuevas generaciones del CRIC. Recordamos a Benjamín Dindicué, Avelino Ul, Justiniano Lame, Marcos Niquinás (“Alberto”), Genaro Sánchez, Rosa Elena Toconás, Mario Sánchez, Genaro Yonda, Cristóbal Sécue, Marden Betancur, Rodolfo Maya Aricape, Milciades Trochez Conda, Edwin Legarda, Juan Cometa, Jorge Caballero, mayores espirituales, guardias indigenas, comuneros, comuneras y una larga lista de indígenas y no indígenas, cuyos acciones continúan presentes en la memoria de los pueblos originarios del Cauca.
Hoy cuando se conmemoran 44 años del Consejo Regional Indígena del Cauca –CRIC, aun en las comunidades vivimos difíciles realidades, sin embargo la fortaleza como pueblos se mantiene. Gracias a quienes han luchado sin cansarse y creen posible la vida con dignidad, expresamos un agradecimiento sincero y un merecido homenaje a quienes iniciaron el camino de lucha y aun nos siguen acompañando de corazón y desinteresadamente.
A los fundadores de nuestra organización, Manuel Transito Sánchez, Álvaro Tombé, Guillermo Tenorio, Trino Morales, Rogelio Mestizo, Ángel María Yoinó, Miguel Sécue, Gregorio Aguilar, Daniel Cotocué, Arcenio Hío, Javier Calambás, Pablo Tattay, Graciela Bolaños, Aida Quilcué, Henry Caballero, entre otros y otras. Sin olvidar a los cientos de líderes y colaboradores que nos han acompañado en los diferentes programas de apoyo de la organización: ambientalistas, defensores de derechos humanos, comunicador@s, compañeros y compañeras de producción, formación, educación, salud, AIC-EPS, Familia (jóvenes, mujeres y mayores), guardia indígena, todos y todas, quienes caminan en el horizonte de la unidad y la hermandad.
Caminamos hacia los 50 años de vida organizativa, y estas luchas, sueños, ideales y herencias espirituales aún no se terminan y no se han materializado en los pueblos y territorios, nos queda la misión de continuar defendiendo el legado histórico que nos dejaron los mayores, pues sus luchas han sido el puntal de las conquistas organizativas, sociales, económicas y políticas en el Departamento del Cauca y Colombia.
24 febrero de 1.971 – 24 de febrero del 2015. 44 Años de vida organizativa, por la pervivencia y permanencia en el territorio hacia el fortalecimiento Político, Cultural y la Autodeterminación como Pueblos Indígenas del Cauca y Colombia. Territorio de Convivencia, Dialogo y Negociación -La María Piendamo, Cauca, Colombia.
