El cambio de gobiernos locales a comienzos de 2024 trajo consigo modificaciones en las cabezas de la distintas Policía Metropolitana de diferentes ciudades. Tal fue el caso de Cali, la capital del Valle del Cauca, una ciudad con serios problemas de inseguridad que para cualquier alcalde tienen que ser tema central dentro de la agenda. Allí llegó el 2 de enero el coronel Carlos Germán Oviedo Lamprea, quien tenía la responsabilidad de reemplazar al brigadier general José Daniel Gualdrón después de que este fuera llamado a liderar a la institución en Bogotá.
Oviedo, ibaguereño de nacimiento y con experiencia en el Departamento de Policía Santander, la Escuela de Aviación Policial, la Dirección de Antinarcóticos, entre otras direcciones, ya sabía entonces que tenía una dura tarea por delante que tenía que ser coordinada con el alcalde Alejandro Eder, pero no se imaginaba que en pocos meses la ciudad que ahora tiene a su mando sería sede de un evento de relevancia mundial que la haría estar en el centro de miles de miradas.
La gran tarea que se le encomendó a Oviedo
Cuando Cali se gana ser la sede de la COP16 en febrero se le presenta una oportunidad única para impulsar el turismo y el comercio local, así como una vitrina perfecta para mostrarse como la capital de la biodiversidad en Colombia, pero, al mismo tiempo, también adquirieron la responsabilidad de garantizarle unas condiciones óptimas a los más de 12.000 visitantes que llegará a la ciudad para el evento, lo cual implica que además de ponerle el tatequieto a los abusos a turistas tendrán que tomar medidas para evitar episodios de inseguridad.
A pesar de que la COP16 es en octubre, desde ya se están moviendo para proteger a los caleños, así lo dio a conocer el alcalde Eder, quien aseguró que ‘La Sucursal del Cielo’ recibirá a 4.000 uniformados de la Policía provenientes de otras regiones que se pondrán bajo el mano de Oviedo.