Este conjunto residencial tiene 71 apartamentos. Fue levantado hace más de 100 años en el centro de Bogotá, ubicado entre calles 11 y 12, entre carreras Tercera y Cuarta. Se llama Calle del Sol y dicen que su historia es aterradora. La impotente construcción no parece un conjunto de apartamentos. Algún día fue un convento: el monasterio Mayor.
Después del 9 de abril de 1948, cuando mataron a Jorge Eliecer Gaitán, todo el centro de la ciudad quedó hecho ruinas y aquel monasterio no fue la excepción. Cinco años después siendo presidente el general Gustavo Rojas Pinilla, lo restaura y lo convierte en la sede del servicio de inteligencia secreto de Colombia.
Por aquellos días convulsos toda persona que fuera de izquierda, era considerado espía y traidor y el gobierno y sus fuerzas armadas los capturaban para sacar sus ideas del camino político y social. Los sótanos de aquella edificación fueron utilizados como calabozos de tortura que hicieron parte de la persecución del gobierno de Rojas Pinilla contra el comunismo.
Tras la salida del general Rojas Pinilla del gobierno y su exilio, el servicio de inteligencia se convirtió en el Departamento Administrativo de Seguridad y cambió de sede y el edificio del centro se convirtió en estación de policía.
En 1987 la firma Rubio y Gómez Ltda su restauración y el paso a uso habitacional, esa construcción finalizó en 1992, desde cuando se convirtió en conjunto residencial, donde los dueños de los apartamentos viven con la historia de los gritos de los torturados.