Cuando por fin pudo traducir del inglés el contenido del correo electrónico que llegaba desde Suiza, El Cole volvía a revisar letra por letra lo que decía.
La FIFA, la federación que organiza el evento orbital más importante del fútbol lo seleccionaba para ir, con todos los gastos pagos, a la ciudad sede del equipo colombiano al mundial, en Kazan, una población agroindustrial a una hora y media en avión desde Moscú.
El Cole planchó el mejor de sus trajes multicolores, preparó sus tenis tricolor y llamó a su peluquero personal para que ideara un corte que estuviera al nivel de esta invitación.
Este personaje de historieta nunca repite un corte porque sabe que siempre hay que tener a la selección renovada en la cabeza.
Tomó a las 5:30 de la mañana el vuelo desde Barranquilla a Madrid con escala en Bogotá para luego volar a Moscú y sin parar aterrizar en Kazan, en total 40 horas de viaje.
Lo esperaba en la puerta del avión Lesly Valeeva, una traductora rusa que habla fluido español, idioma por el que se interesó al ver a través de la televisión de su país, que transmite de vez en cuando novelas latinoamericanas, a Betty La fea...”Es bacana” le escuché decir al otro lado de la línea a la intérprete a quien llamé para construir esta historia para Las2orillas.
Lesly vio salir del avión a un papagayo en forma de hombre que abrió su gran boca al tiempo que extendía sus alas y soltó un grito resonante que paralizó al aeropuerto de Kazan.”Viva Colombia, viva Rusia, viva la Selección Colombia”. Después de gritar de emoción el Cole Se abalanzó sobre Lesly y la abrazo con fuerza como si se hubiera reencontrado con un pariente.
“Me dijeron en la FIFA que haría la traducción para un colombiano invitado de honor de la Federación, pero nunca me explicaron que tendría el placer de estar con uno de los colombianos más apasionantes que he conocido en mi vida” dice Lesly para resumir el paso de El Cole por Kazan.
El personaje que representa a la Marca barranquillera Tecnoglass, que nació para el fútbol hace tres décadas cuando animaba al Junior en el metropolitano y que ha ido a más mundiales que muchos jugadores de fútbol recibió de la organización del evento orbital un homenaje al ser seleccionado para contar, previo al mundial, qué es y cómo es Colombia.
La Rutina:
El Cole se levanta muy temprano, se enfunda en sus trajes multicolores y en compañía de su traductora cumple una agenda de embajador.
La FIFA organiza ruedas de prensa para que el Cole responda a las preguntas de decenas de periodistas de todo el mundo, preguntas de todo tipo.
Para ello se preparado a fondo para este viaje y para responder a esas preguntas que van más allá de lo futbolístico.
Historia, economía, gastronomía, literatura. "Ahora entiendo lo que pasa con las reinas en Cartagena cuando les preguntan de todo, yo aquí no puedo titubear, está en juego el prestigio del país” dice con la seguridad de un embajador.
El Cole recorre el estadio donde jugará Colombia en Kazan con el orgullo que le da el haber trabajado tantos años para animar a la selección Colombia.
Sabe que es uno de los pocos aficionados que tienen aseguradas dos o tres tomas por partido en las transmisiones que llegan en simultáneo a más de 300 millones de televidentes.
En su recorrido promocional ha comido los más extraños platos posibles que le ofrecen mientras le habla a los rusos sobre la gastronomía caribeña. “Lo que más les ha impactado es la descripción de la Arepa de Huevo. Haré una presentación de ese plato en público usando maíz proveniente de Africa, huevos de Gallina de Sanpetesburgo y aceite de oliva Griego... No sé que pase ahí pero yo no me asusto... Le pondré el cariño colombiano y saldrá perfecta la receta" explica ante de despedirse de afán porque tiene una entrevista con la televisión japonesa que lo reclama para que les cuente como será el rival del país nipón en la primera ronda de eliminatorias en Kazan.