Así como el gobierno de Iván Duque cometió tantos errores que catapulto a la presidencia a Gustavo Petro, el gobierno de Martín Sánchez en Quibdó cometió tantos desaciertos y errores que logro lo que parecía ser un imposible.
Generó un cambio que permitió por primera vez en muchos años que la gente votara a conciencia y no por migajas. Logró que el voto de opinión venciera al voto comprado, al denominado voto de muertos de hambre, e hiciera elegir a personas nuevas con imagen fresca y renovada, subrayando la palabra imagen porque detrás de ellos desafortunadamente hay intereses de personas inescrupulosas que están listos a empezar a recuperar su inversión a través de terceros. Estos cambios obligan a que los elegidos este 29 de octubre enfrenten nuevos y difíciles retos y que tengan la oportunidad de dar el cambio que Quibdó y el Chocó merecen .
El primer reto y el más difícil que tienen que afrontar obviamente es el de la independencia frente a aquellos que hicieron aportes a sus campañas para que sus gobiernos tengan la fuerza y la libertad de tomar las mejores decisiones en beneficio del pueblo.
Esta oportunidad no la pueden dejar pasar por darles gusto a personas inescrupulosas que buscaran direccionar los recursos públicos en beneficio de ellos. Para esto tienen que tener un carácter y una determinación dignas de verdaderos estadistas y no de simples títeres.
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Lo segundo que tienen que hacer es nombrar un equipo de trabajo técnico calificado y autónomo que les permita cumplir con profesionalismo las metas de gobierno y que sean coequiperos y no simples piezas de relleno. Deberán apoyarse en un concejo y asamblea renovados que les aporten ideas y los mantenga conectados con el pueblo. Para salir adelante se necesita de todo un grupo que jale y que ayude a tomar decisiones certeras y prácticas y un equipo capaz de orientarlos de la mejor manera.
Lo tercero que requieren es fijarse metas claras desde el inicio que sean ambiciosas pero que se puedan lograr en el cuatrienio, trabajando sobre lo poco construido que hay utilizando las herramientas que permite la ley y sobre todo deberán tener en mente cada minuto del día que son servidores públicos , que manejan recursos ajenos y por lo tanto tienen la obligación legal y el deber moral de cuidarlos en nombre de aquellos que los eligieron de manera desinteresada y con decoro.
Si tienen carácter para tener independencia, si se rodean de un equipo calificado y son celosos de los recursos entregados a su cargo , los gravísimos problemas de corrupción, inseguridad y desempleo que afrontan la ciudad y el departamento los podrán afrontar de la mejor manera y asegurarán su futuro político para aspiraciones futuras de manera local o nacional.
Por primera vez habló el pueblo con sabiduría y honestidad y por primera vez el pueblo puede mirar a los ojos a sus elegidos y exigirles el cumplimiento de su carta magna y sus planes de desarrollo a cabalidad. Todo el Chocó espera que estos jóvenes estén a la altura de este mandato.