En este momento hay de todo, menos certezas, frente a las elecciones presidenciales que se llevarán a cabo en Venezuela el próximo 28 de julio, en las que Nicolás Maduro, quien lleva en la Presidencia desde marzo de 2013, buscará alargar su mandato otros 6 años hasta 2031.
Las dudas recaen sobre la persona que lo acompañará en el tarjetón, puesto que, tras la inhabilidad de María Corina Machado, quien había ganado ampliamente las consultas primarias de la oposición y quien, según expertos, hubiera partido con ventaja en las elecciones y después de que el plan B, Corina Yoris, no pudiera inscribir su candidatura, el puesto le terminó correspondiendo al gobernador de Zulia, Manuel Rosales, quien, a pesar de ser la única ficha que le queda a los opositores, no cuenta con un apoyo unificado como sí lo hacían las dos anteriores.
Ante esta situación, siete países de Latinoamérica, incluyendo a la Argentina de Milei, la Guatemala de Arévalo, la Ecuador de Noboa, entre otras, emitieron un comunicado expresando una grave preocupación frente a las elecciones y poniendo en tela de juicio la transparencia del proceso electoral. Le piden al régimen venezolano que permita las inscripciones de todos los candidatos que cumplan con los requisitos.
Comunicado conjunto de Argentina, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, Guatemala, Paraguay, Perú y Uruguay expresando su grave preocupación por el impedimento de inscripción a aspirantes presidenciales en Venezuela. Faltan menos de 24 horas para que termine el plazo pic.twitter.com/9jPObYVbfJ
— Gabriela Frías (@gfrias) March 25, 2024
Llamó la ausencia del presidente Gustavo Petro, de quien se había incluso hablado que habría sido buscado por la Embajada de Estados Unidos para los buenos oficios con Venezuela y buscar un acuerdo que asegurara unas elecciones mínimamente democráticas con la presencia de una oposición no de juguete.
Cabe recordar que recientemente el gobierno de Estados Unidos le levantó sanciones a Venezuela a cambio de que se llevaran a cabo unas elecciones con una participación válidamente democrática, pero el negociador Rodríguez y Maduro no le cumplieron a Biden. Las consecuencias se verán a futuro.
Muy posiblemente el canciller encargado Luis Gilberto Murillo, quien tiende relación directa con el gobierno Biden, estuvo detrás de un comunicado en el que, muy diplomático y sin ser tajante, pide un proceso electoral presidencial libre, justo y competitivo porque se podría afectar la confianza de la comunidad internacional.
Comunicado de prensa del Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia
— Cancillería Colombia (@CancilleriaCol) March 26, 2024
Bogotá, marzo 26 de 2024. 🧵👇 pic.twitter.com/o05ufbo5RD
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