Nunca ha existido en el país un deportista como Egan Bernal. Aún no nos acostumbramos a tener un extraterrestre entre nosotros. Cansados de ver por televisión a Hinault, a Induraín, a Pantani, aún no asimilamos que esté con nosotros alguien capaz de desafiar al propio Chris Froome en su equipo británico. Es que el INEOS se construyó a partir de lo que quisiera el cuatro veces campeón del Tour. Pero Egan no le va a ser de gregario a nadie, menos ahora que es el campeón del Tour más joven en 100 años. Por eso Froome amenazó con irse del equipo pero ya no puede. Lo único que debe hacer es retar a Egan y ganarle en la carretera.
Con esto lo amenazó este 28 de mayo en una entrevista al canal Sky Sports. Froome no corrió el Tour del año pasado por una fractura de fémur y eso ayudó a que Egan compartiera la capitanía del equipo más poderoso del mundo con el otro británico Geraint Thomas. Por eso Froome ha dejado muy claro que no le trabajará a Egan bajo ninguna circunstancia y, al contrario, lo ha desafiado: "Me recuperé de la lesión. Este parón me ha ayudado, hacía seis o siete horas de entrenamiento por día. No ha sido fácil, pero ahora estamos todos igualados. Estoy muy motivado por volver a correr como antes. Este período me dio dos meses más para estar listo". Además lanzó el guantazo: "Estoy preparado para el Tour, incluso para ser el líder. Lo más importante es que al final del día el equipo haya ganado, es lo más importante. Luego la carretera dirá quién es el líder. Encontraremos una solución y respetaremos nuestros objetivos. Cada uno querrá ganar, pero lo más importante es el equipo".
La carretera, seguramente, volverá a demostrar que Egan es el presente y futuro del ciclismo mundial y Froome sólo pasado.
