Actualmente, según reportan las autoridades, hay cerca de 350 personas confinadas dentro de una iglesia en Suárez, Cauca, que están huyendo de los combates que está teniendo la Fuerza Pública con las disidencias del Estado Mayor Central de las Farc. Ese municipio es de donde es oriunda la vicepresidenta y ministra de la Igualdad, Francia Márquez e históricamente ha sido víctima de la violencia al igual que muchas otras zonas del Departamento, como es el caso de Morales, que esta misma semana recibió un ataque que se llevó la vida de dos Policías.
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Justamente, esa es la región donde se han hecho más fuertes las disidencias de Iván Mordisco, quienes tienen azotada a la población civil, motivo que llevó al presidente Gustavo Petro ordenar la no reanudación del cese al fuego y, por el contrario, desplegar a la Fuerza Pública en la zona.
La tarea de defender la soberanía y desarticular a los grupos armados organizados presentes en dicho Departamento le corresponde al Comando Específico del Cauca, que tiene como comandante al brigadier general Federico Alberto Mejía Torres.
Mejía es el mismo militar que quiso destapar un escándalo en el Ejército a finales del año pasado
Él estuvo entre los miembros de la cúpula militar que denunciaron al general (r) Jhon Jairo Rojas por presuntos actos de corrupción y otros hechos dentro de la institución, situación que no le permitió a Rojas ascender a mayor general y que lo llevó a ir a instancias judiciales asegurando que todo se trata de un montaje, con petición de reintegro y denuncia al ya excomandante del Ejército, Luis Mauricio Ospina.
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