Cerca del año 40 del siglo xx llegaron los primeros habitantes de lo que hoy se llama Puerto Nariño. En ese entonces era un puerto principal para comprar la leña necesaria para los barcos de vapor. “El barco se llamaba Nariño, por eso le pusieron el nombre a este lugar”, nos cuenta uno de los antiguos cazadores de la región que nos recibe en el Museo Natütama.
“Cada uno hacía los arrumes para el día que llegaba el barco. Los primeros moradores que fueron Don Vargas, que en paz descanse, los Coello y los López, estaban ahí para dar leña”, continúa contando el mismo cazador y pescador que hoy hace parte del equipo que construyó el museo de la cultura del río. “Se hicieron cerca de los lagos porque había pescados. El lago se beneficia del río porque pasan todos los peces. Era el tiempo del caucho, había mucha nutria y mucho caimán. Mataban los animales para sacar la piel y venderla al Perú. Todo eso era para el Perú.”
