Hay quienes sueñan, pero a la par que sueñan, realizan las acciones que les permita que esos pensamientos se vayan concretando en realidades.
Tal el caso de este sevillano; de la Sevilla de la montaña, aquella que aseguran, produce el café más suave de Colombia y la que denominan hoy «el balcón del Valle del Cauca».
Se llama Jairo Duque y además de muchas acciones realizadas en su vida, es hoy un emigrante que desde los Estados Unidos empieza a caminar por los senderos difíciles del arte por medio de la pintura.
Con el dialogué, pues me gusta conocer los comienzos y los momentos que van convirtiendo un ser humano de común, a una persona con atributos y oficios que le destacan de los demás.
Recuerda, aún con el filtro que impone el paso de los años, su ciudad natal y las pilatunas de muchacho travieso en la calle «Puyana», no olvida que por unas monedas arreaba las vacas de Don Ramón hacia el potrero donde pastaban luego del ordeño; también rememora como el tanque de reserva del acueducto muchas veces se convirtió en la piscina donde dio sus primeros chapuzones; sonríe al rememorar que sabían bien como evadir al vigilante y en ocasiones a la policía.
Tampoco olvida que aprendió de amores con las primeras novias de su juventud y que a veces Cumbarco; Tres Esquinas, La Estelia, se convertían en destino de sus ansias de explorador, junto a sus amigos.
También está en sus recuerdos que: «Nuestra familia fue de escasos recursos; la carga era pesada para un matrimonio con un solo ingreso y cuatro hijos, pero pese a las dificultades fuimos unidos. Eso sí, no tuvimos la oportunidad de acceso a la universidad como debería ser, por lo cual cada uno asumió su camino de estudio y preparación por cuenta propia después del bachillerato. Yo pienso que esa difícil situación nos hizo resistentes, responsables y trabajadores. Creo que de todos los hermanos; yo era el más desordenado ya que no terminé la universidad por darle prioridad a mis sueños involucrándome en los movimientos estudiantiles y sociales de los 70 y 80.
Jairo sabe que no hubo una influencia evidente de su familia para los asuntos del arte, pero sí que lo marcaron las clases de Arte, Filosofía y Economía que recibió en el Inem Jorge Isaac de Cali. Tampoco olvida algunos compañeros de la primera promoción de 1976 a la que pertenece.
Hoy, mientras charlamos, devuelve la película para contarme: «me fascinaban los talleres de arte por el manejo de los materiales; así mismo las disertaciones del viejo profesor con sus referencias a la historia del arte. Tampoco olvido las polémicas con el profesor de filosofía. Creo que aquellos cruces de ideas y argumentos, que poco yo entendía, tejieron las puntadas que terminarían después en mi tardía dedicación a la pintura».
Hay eso que llaman vocaciones tardías. ¿Es ese su caso o ya la pintura formaba parte de su vida?. Entiendo que hace pocos años ha tomado la pintura como una forma de expresarse.
«Obviamente lo mío es una vocación tardía, pero la curiosidad y el habito de buscar han estado presentes en mi trasegar por la vida desde temprana edad. Los sicólogos deben tener explicaciones acertadas para este aspecto, porque en nuestras condiciones de escases, repetidas veces sin la alimentación adecuada, con intensas caminatas del colegio a la casa por no tener pa’l bus y un panorama poco esperanzador para el futuro, le tocaba a uno desarrollar destrezas adicionales para no quedarse fuera. En este punto hoy reconozco la importancia de tener familia, porque muchos compañeros de hogares disfuncionales no pasaron ilesos esta línea. Y sí; en ese camino están los elementos que afloraron mi vena artística a avanzada edad».
¿Qué circunstancias le deciden a pintar? ¿Cuándo y dónde fueron las primeras veces que sometió su talento cómo pintor a consideración del público?
«Eso tiene que ver con los esquemas que adopte para vivir y con la persona con quien construí la familia, pues ella en si era un enigma, muy bella y con pasión por el arte. Sin descuidar la familia, siempre di prioridad a mis compromisos enfocados en la lucha social y sindical cuando estuve en Colombia; y como inmigrante en USA fueron tres quinquenios de enfoque en el trabajo y en la construcción de la familia hasta lograr que los muchachos tuvieran formación universitaria.
Alrededor del 2015 mi esposa y yo reflexionamos sobre la labor cumplida y eso despertó el entusiasmo para dedicarme a la pintura, pues ya estábamos en condiciones mejores de trabajo y con más tiempo para nuestras aficiones.
Como pintor principiante, mi entorno familiar y algunos amigos han sido mi público. En realidad empecé a pintar por puro gusto, sin pretensiones de fama y menos de hacer de esto un negocio, porque tenía el trauma pregonado por algunos mayores, de que “de eso no se vive” y “la cultura no paga”, pero en mi nueva situación, con la familia unida, los hijos criados y sanos, un ingreso constante y suficiente y una experiencia en diseño grafico y publicidad que me hace ser amigable con las tecnologías computarizadas, decido incursionar en la producción artística, ahora si, dedicando a ello todo mi tiempo libre».
Es válido reconocer el apoyo sin condiciones de mi esposa Rubby y de mis hijos Valentina y Daniel Esteban en este proceso, pues han sido mis cómplices, mis críticos, mi equipo de combate y mi soporte constante.
Cuál fue la primera obra que hizo y dio a conocer y qué efectos tuvo entre el público y en la crítica? ¿Cómo se sintió ante los comentarios?
«Una de las primeras obras fue “El Trasteo” en 2018. Un acrílico sobre lienzo trabajado con la técnica de transferencia de imagen. Mi producción pictórica en la técnica de Acuarela es reciente, desde 2021. Desde Abril del 2023 se están exhibiendo en varias galerías de arte de Europa y Estados Unidos mediante la plataforma Artboxy. Las exhibiciones físicas hechas en la biblioteca del Este de Los Ángeles y la exposición de una docena de mis acuarelas en el Consulado General de Colombia en Los Ángeles – Beverly Hills, desde Octubre 2023 a Enero 2024 han recibido comentarios favorables del público. Aún no he tenido la ocasión de someter mi trabajo a una crítica de arte profesional, lo cual sería interesante para un pintor autodidacta, como yo».
¿Considera el arte, y en particular la pintura una forma de expresión, la manera de contarle al mundo sobre su ser interior y creador?
«Las artes plásticas y en ellas la pintura es para mí un encuentro liberador. La gran ventaja que estoy procurando preservar es que no dependo de la venta de mis obras para el diario vivir. Lo que no significa negarme al mercado del arte. Pero no es mi afán en el momento actual. Pinto y exploro con libertad, me recreo en cada proyecto. Después de tantas experiencias de vida asumo esta etapa de producción artística como un privilegio e intento crecer en conocimientos de la historia del arte, movimientos artísticos, técnicas, materiales y la diversidad de expresiones artísticas de hoy».
¿Cómo ha sido hasta hoy el oficio de pintar y qué logros ha tenido en este campo?
«Debo aclarar que no soy un artista profesional. Mi actividad lúdica y recreativa es la pintura artística. Las técnicas que ejecuto en esta coyuntura son Acuarela sobre papel prensado en frio con tamaños en su mayoría de 22”x15”.
La técnica de Arte Digital que ejecuto, la realizo aplicando mi saber hacer analógico de la acuarela, pero sin agua. En este punto la tecnología despliega un inmenso menú de recursos que activan la creatividad a niveles que son alucinantes, tal como lo podemos percibir en las redes sociales con la inteligencia artificial. El retrato lo estoy trabajando en arte digital. El paisaje natural y urbano, así como los abstractos los trabajo en acuarela. Pero esa asignación no es rígida, de hecho tengo obras combinadas, retrato en acuarela y abstractos en digital».
¿En qué momento se siente reconocido como artista y cómo ha sido la experiencia de poder ser llamado pintor y estar en exposiciones con otras personas que también ejercen el oficio?
«Cuando vendí mi primera obra, me sentí reconocido como artista, fue en 2017. Por esos días, vino a mi oficina una niña como de 11 años con su madre. Esa niña venía en busca de uno de mis cuadros abstractos hecho con la técnica del vertido de fluidos acrílicos sobre lienzo. El momento en que esa niña me miro con admiración, me hizo sentir confiado para seguir adelante. Hasta ese tiempo yo lidiaba relativamente fuerte con el síndrome del impostor, agravado porque yo no había hecho una carrera en la academia y por los fantasmas que con frecuencia acosan a los principiantes. Eso me impulso a dedicar más tiempo al estudio por cuenta propia hasta conseguir la seguridad suficiente para ir soltando la creatividad. Cada obra, en cualquiera de las técnicas que uso, es un peldaño de aprendizaje en este fascinante comienzo como pintor».
¿Cuáles son las motivaciones que tiene en sus obras?
«Actualmente el tema que me atrapa, casi como una obsesión, es la expresión contra el genocidio ejecutado contra el pueblo palestino. Mis acuarelas “Yusif and Sarah”, “The world is watching” que son dramáticas imágenes con los niños como victimas, las he exhibido en screen en Andakulova Gallery de Dubai y Nicoleta Gallery de Berlin. En pintura figurativa surrealista con formas geométricas estilo cubista he producido “Not Silence” en arte digital y 2 acuarelas “Homes and faces” que llevan el mensaje contra la matanza y destrucción en Palestina.
Busco pintar sobre temas de contenido social y sobre lo cotidiano, así por ejemplo en la serie sobre los pueblos palafitos de la Ciénaga grande de Santa Marta, que es un conjunto de 9 acuarelas inspiradas en fotogramas de documental, procuro registrar las típicas viviendas, el medio de transporte, las labores de los pobladores de estas comunidades, porque me interesa llamar la atención sobre los problemas que los afectan.
Y siguiendo con lo social, también tengo una serie de 5 acuarelas en homenaje a los jóvenes luchadores de la primera línea de la resistencia en el estallido social del 2021 en Colombia, donde destaco a los dignos protestantes de Puerto Resistencia y registro el drama del líder asesinado Joan Sebastián y su historia con la yotuber alemana Rebecca SproBer.
El otro tema de mi interés es el paisaje urbano y registro artístico de lo cotidiano, que lo trabajo en estilos semi-abstrato y figurativo».
¿Qué exposiciones ha hecho hasta hoy y dónde?
«En el Consulado general de Colombia en Los Ángeles, expuse 16 obras desde Octubre 2023 hasta Enero 2024, entre ellas la serie sobre la Ciénaga Grande de Santa Marta, algunos abstractos y la acuarela «Yusif and Sarah» muy actual por la barbarie en Palestina.
Participe en Agosto 2023 con los poetas Dukardo Hinestrosa y Joaquín López en una exposición de colombianos en la Biblioteca del Este de Los Ángeles, donde recibimos un diploma de reconocimiento de la oficina de la Supervisora Hilda Solis del condado de Los Ángeles por nuestra labor cultural en la comunidad hispana. En este evento tuve el gusto de vender 3 de mis acuarelas, una de ellas a la Consúl general de Colombia en Los Angeles, Nuevo Mexico y Arizona, señora Olga Cielo Molina.
A través de Artboxy mis obras han sido exhibidas en pantalla desde abril 2023 en estas galerías de arte:
NY ArtExpo 2023- New York
ArtExpo Basel- Miami
Nicoleta Gallery-Berlin
Cipriarte Gallery-Venecia
Andie Art- Athens
Andakulova Gallery- Dubai
Thomson Gallery- Zug/Suiza
Johnathan Schultz Gallery- Miami
Casa del Arte – Palma Espana
Swis Art Expo –Zurich/Suiza
Finity Gallery -Berlin
¿Cuáles cree usted, son las condiciones que hace de alguien un artista?
«La primera condición, en mi opinión, es querer hacer arte, la segunda es hacer esfuerzo por lograrlo y la tercera es disfrutarlo en todo el proceso. Ellas están ligadas entre si y deben responder a criterios: decorativo, critica social, político, religioso; y fundamentos que definan el roll del artista, su enfoque, su concepción de la vida, su cosmovisión, etc. Yo por ejemplo, intento que toda obra tenga una intencionalidad o un mensaje, explicito o velado. Pero no descarto hacer una obra por la pura satisfacción visual de formas o colores».
¿Qué hace para que se conozca su trabajo? ¿Cómo está contando y mostrando al mundo sobre su trabajo?
«Me he tomado el tiempo para ir implementando recursos que sirvan a mostrar el trabajo artístico. Son varios los procesos que demandan atención. Por ejemplo, el almacenamiento de las obras requiere un espacio, un cubrimiento y protección; la atención de las redes sociales con publicaciones regulares en tiktok demandan tiempo y su sistema de archivo; la difusión en Instagram, Facebook, Messenger aparentemente rápida, también demanda su tiempo.
Fue a inicios del 2023 cuando ya había tomado la decisión de focalizar mi producción en acuarela, trabajando menos con acrílicos, que incursione en la configuración de un catalogo, una página web (www.artcoloragua.com) y una plataforma de exhibición (Artboxy), dando prioridad a mis publicaciones en Tiktok (@Jdukeart) y distribuyendo el contenido vía Whatsapp. En ese impulso, abrí también mi tienda online a través de Etsy (artcoloragua.etsy.com). En general se podría decir que mi experiencia con la pintura incluye todo el proceso y depende de mis propios recursos de tiempo y de costos. A hoy esas actividades son parte de mi rutina y disfruto cada proceso».
¿Qué escenario es su sueño para exponer?
«El Museo de Arte Moderno de Los Ángeles. Me gustaría, en algún momento de mi avance y maduración como artista, tener la opción de exhibir en alguno estos templos del arte al lado de reconocidos nombres y marcas.
Hablando de sueños, si te puedo comentar mi experiencia con el metaverso, sobre lo cual deje sembradas las bases para montar una exhibición permanente de mis obras de arte en 108 parcelas del mundo virtual de OVR (Over the reality). Ese trabajo está por hacerse, pero los hexágonos que ya son de mi propiedad como NFTs (Tokens no fungibles), me dan la posibilidad de subir mis obras que se pueden ver en 3D en sitios turísticos del mundo como La Torre Eiffel de Paris, La Quinta avenida de New York, El Castillo de San Felipe en Cartagena, La Plaza de Bolívar en Bogotá, La entrada al estadio Pascual Guerrero, La Plaza de ingenierías de la Univalle, El Boulevard del rio en Cali, etc.»
¿Su condición de principiante ha sido impedimento para su carrera o por el contrario se la ha facilitado?.
«Mi trabajo artístico esta apenas comenzando y esa condición ha sido irrelevante para exhibir mi trabajo en los sitios donde lo he llevado. En realidad mi afán por usar los recursos a mi personal alcance es mucho mayor que mi preocupación por ser aceptado en espacios tradicionales del mercado del arte. Soy consciente de que mi camino como artista esta en sus comienzos y que debido a que mis años vitales saludables son escasos, no está en mi plan obsesionarme con el éxito y la fama.
Si llega, será bien recibido. Pero para mí, esta actividad es una forma de pasar a gusto lo que me queda de existencia, haciendo lo que debo hacer como trabajador y luego como retirado haciendo arte de manera libre, sin clichés ni compromisos. Lo que para mi hoy constituye un desafío es en superar la dificultad que me produce la lectura de obras de arte. Me frustra el hecho de enfrentarme a una obra y no saber por dónde empezar a mirarla y descubrir su riqueza y su mensaje. Es por esta razón que yo le doy mucha importancia al texto o narrativa que acompaña la obra, porque esa información que no tiene que ser extensa, me contextualiza sobre el autor y su obra, las técnicas, los materiales empleados y de ese modo me puedo involucrar mejor con ese trabajo».
¿Qué cree qué predomina hoy en el mundo del arte: el comercio o el talento?
«¡El comercio! Pero yo me inclino a favor de que haya más impulso por la formación en disciplinas que fundamentan las artes plásticas. Creo que hay una degradación de la calidad aunque esto lo digo sin ninguna pretensión de posar de autoridad, o juzgando creaciones rupturistas como el arte conceptual. Creo que esas formas artísticas son validas desde la perspectiva del sujeto que las produce, aunque no sean de mi gusto».
¿Cómo define su trabajo y su propuesta pictórica?
«El mío es arte con consciencia. Me refiero a mi consciencia espiritual y por extensión material, a mi búsqueda de la felicidad, de la paz, del amor, de la libertad, de la riqueza, de la tolerancia, de la justicia».
¿Qué es para usted el arte?
«El arte es una actividad que conecta la esencia del ser con su entorno material. Para mí, es conexión espiritual. Es un vehículo de la expresión individual, pero también es lo que nos hace bondadosamente diferentes como especie. El arte conlleva cultura, civilización y vida. Por eso yo busco la belleza en mis trabajos, así el tema sea tan duro como la guerra».
Cuáles son sus proyectos a mediano y corto plazo?
«En el corto plazo pretendo mantener la dinámica de producir acuarela y arte digital en los estilos ya referidos y acumular experiencias y asimilar aprendizajes que pueda reflejar en mis obras.
Como un anhelo en el mediano plazo, quiero cambiar mi vida de trabajador a pensionado ejecutando pintura itinerante en estadías de 2 a 3 meses en pueblos de Colombia, América Latina, Estados Unidos y Europa».
Una frase que sea la que le impulsa cada día?
«A diario hago mi mantra espiritual, que es mi fuente de inspiración y fortaleza».
Una reflexión para quienes deseen emprender los caminos del arte
«La información está al alcance de todos. El conocimiento es indispensable para adoptar los criterios que lo van formando como artista. Haga un plan y disciplinadamente dé un paso cada vez sin prisa y sin pausa. Debo destacar la importancia de los profesionales del arte, la cultura y el periodismo que son soporte para que la humanidad avance y no perezca con el planeta en la hecatombe del consumismo y la guerra».
La obra del pintor se puede apreciar en www.artcoloragua.com